Las complicaciones para la puesta a punto de la piscina descubierta del parque Ramón Barba, ante la temporada estival, no dejan de crecer. El concejal de Deportes, Fernando Caride, explica que el recién reformado vaso de las instalaciones de la parroquia de O Temple presenta problemas estructurales. Los técnicos municipales han detectado filtraciones, que la empresa adjudicataria de la obra deberá resolver.

La reforma de estas instalaciones fue contratada ya por el anterior Gobierno local. La previsión era que estuvieran listas para el inicio del pasado verano, pero los trabajos acabaron a finales de agosto. Cuando el nuevo Ejecutivo municipal recepcionó la actuación se topó con la sorpresa de que el proyecto no incluía el acondicionamiento de la zona perimetral del vaso. Tampoco recogía la eliminación de los antiguos vestuarios, a pesar de que se construyeron unos nuevos, por lo que se ha perdido superficie para el esparcimiento de los bañistas.

El Concello anunció que remediaría esta situación. De hecho, en el mes de septiembre avanzó que reservaría una partida en los presupuestos de 2012 para poder finalizar la mejora de la piscina y que estimaba que los trabajos comenzarían a principios de año. Este nuevo contratiempo, explica el concejal, ha obligado a cambiar los planes. "Una vez que tengamos la certeza de que los problemas estructurales del vaso están solucionados veremos si realizamos el acondicionamiento del perímetro", indica. Reconoce que no hay ninguna cantidad reservada para ello en el presupuesto, pero sostiene que se podrá realizar con fondos propios y personal municipal.

La puesta a punto que sí comenzará en poco tiempo es la de la piscina descubierta de la capital municipal, la de O Balado. Cambre podrá emprender estos trabajos gracias al apoyo económico de la Diputación de A Coruña, que ha destinado 31.004 euros a la adecuación de estas instalaciones públicas a la normativa vigente. La Concejalía de Deportes ha iniciado ya el expediente para la contratación de las obras, que consistirán en la ampliación de la zona pavimentada que rodea la piscina, así como la sustitución de las baldosas existentes. Además, los trabajos incluyen la implantación de varias medidas de protección, la reparación del vallado del recinto y la instalación de un nuevo punto de luz.

La de O Balado y la del parque Ramón Barba son las dos únicas piscinas públicas descubiertas del municipio, que también cuenta con una climatizada en A Barcala.