Después de que el Gobierno local aprobase el pasado sábado en solitario su plan de ajuste para hacer frente al préstamo de un millón de euros para pagar la deuda a los proveedores, el Partido Popular denuncia que el municipio oleirense sea el único que no ha incluido ninguna reducción de gastos en su propuesta. El portavoz del PP de Oleiros, Andrés Delgado Montes, explicó ayer que tanto el alcalde como los concejales "no están dispuestos a renunciar" a su nivel de vida a pesar de "los graves problemas económicos que atraviesa el Concello".
Los populares consideran que son los vecinos quienes están pagando "de su bolsillo el tren de vida de su Gobierno municipal". En este sentido, insiste en que el Ayuntamiento solo está dispuesto a ajustar "la cartera de los ciudadanos". "Los habitantes tendrán que pagar más por obtener el mismo tipo de servicios", aseguró el portavoz del PP. Delgado advirtió de que esta política de "cero reducciones" supondrá un incremento de todas las tasas municipales convirtiendo a Oleiros en "el municipio más caro del área metropolitana" en los próximos años.
La propuesta municipal para hacer frente al préstamo de un millón de euros al Instituto de Crédito Oficial (ICO) se centra en el incremento de tasas municipales y en la supresión de las bonificaciones en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), en el Impuesto de Actividades Económicas y en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM). Como única medida de ahorro, la Administración local propuso eliminar una plaza de graduado social de la Relación de Puestos de Trabajo, con la que prevé recaudar durante este año 39,24 euros.
La ausencia de otras medidas en este sentido motivó precisamente la abstención de los grupos de la oposición, que demandan una revisión de los 33 contratos que el Concello mantiene con empresas que prestan servicios en el Ayuntamiento para conseguir una mejor oferta económica, la disminución de concejalías o la eliminación del coche oficial del que disfruta el alcalde.
