"Cada día que pasa es un día menos" y el alcalde de Oza do Ríos, Pablo González (PP), no ve llegar el día en que Coca-Cola se instale en el municipio y marque el inicio de "un ciclo de prosperidad económica y social para los vecinos" de este concello rural de 3.200 habitantes.

El pleno aprobó ayer con el voto a favor del PP y PSOE y la ausencia del BNG la modificación del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) para recalificar como industriales los 354.660 metros cuadrados de Mondoi propiedad de Begano.

A consulta del PSOE, el regidor aseguró que el abastecimiento de la planta, que consumirá 400.000 metros cúbicos anuales, el doble que la población, está garantizado. El Concello pretende suministrar el agua con una nueva captación al río Mero en el lugar de Manoquín.

Su propuesta dispone del visto bueno, a priori, de la Empresa Municipal de Aguas de La Coruña (Emalcsa) y Augas de Galicia que precisan, sin embargo, que el proyecto de urbanización deberá recoger un estudio que tenga en cuenta "los problemas de regulación en época estival" y otro sobre los efectos de la actuación en el Lugar de Interés Comunitario (LIC) Encoro Abegondo-Cecebre, dado que la captación se localiza a 400 metros agua arriba del límite de la presa. La Xunta también urge medidas de protección del arroyo Castrillón, que atraviesa el ámbito.

El Gobierno no alberga ninguna duda sobre la viabilidad del progresivo traslado de Coca-Cola. "¿Cómo no va a haber agua en Oza dos Ríos?", se preguntaba en tono jocoso el regidor, en respuesta a las preguntas del PSOE sobre el posible impacto en el caudal ecológico del Mero: "¿Me voy a seguir bañando en el río?", preguntaba el edil. La misma interrogante que se hace el BNG, que duda que el Concello pueda garantizar el suministro a la planta en condiciones óptimas para los vecinos. La formación, que no acudió a la sesión plenaria, emitió un comunicado a prensa y otro al Concello en que exigía que se aplazase la convocatoria para estudiar con calma la memoria ambiental que la Xunta emitió el pasado 23 de mayo. "¿A qué vienen estas prisas?", se preguntan.

El Ejecutivo municipal no duda ni un momento antes de responder. El alcalde insiste en la necesidad de "acelerar al máximo las gestiones" para que Coca-Cola se instale "cuanto antes". González Cacheiro apela a la creación de empleo y confía en que la multinacional atraiga a Oza dos Ríos a otras empresas. El regidor insta a la Xunta a autorizar de forma definitiva la recalificación de los terrenos "en un tiempo récord". "Sería fabuloso que en tres semanas como máximo tuviésemos la resolución, proyectos como este no pueden quedarse esperando en la cola", sostiene.

Los socialistas, pese a sus dudas, también esperan con ansia la llegada de la empresa. "Ojalá Coca-Cola esté aquí dentro de dos años", deseó en alto su portavoz. El alcalde confía en que las obras arranquen en cuatro meses y disipó las dudas de la oposición sobre del convenio ahora que Cobega, la mayor franquicia de Coca-Cola en España, se ha hecho con el 67% del capital de la gallega Begano.

González Cacheiro explicó que, tras el anuncio de la compra, se puso en contacto con la dirección de Cobega, que le garantizó que "sigue adelante con el proyecto". La adquisición de Begano más que un handicap, supondrá un beneficio, sostiene el Gobierno local, que apela a la importante presencia de la empresa en África.

La Consellería de Medio Ambiente tiene ahora un plazo de dos meses para informar sobre la modificación urbanística. El Concello espera que llegue antes.