El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha descubierto en la provincia de A Coruña cuatro granjas clandestinas de conejos: una en Abegondo, otra en Sobrado y dos en Curtis. Los animales eran vendidos por los propietarios de las explotaciones a gestores de tecores, áreas para la caza, de distintos municipios. Los agentes comprobaron que las cuatro granjas carecían de cualquier tipo de documentación administrativa o sanitaria. Los conejos, en jaulas, en una de las granjas estaban dentro de una cuadrada, sin luz, y rodeados de estiércol.
El Seprona verificó que en estas granjas se desconocía que funcionaban como tal, carecían de control sanitario o veterinario. Este departamento de la Guardia Civil ha enviado los informes de denuncia de estos hechos descubiertos a la Consellería de Medio Rural y también a los tres concellos en los que se hallaron las granjas ilegales, para que abran expedientes y tomen medidas. Los propietarios de estas granjas han infringido distintos artículos de la legislación vigente sobre sanidad animal, defensa del consumidor y producción alimentaria, ordenación de las explotaciones cunículas y protección ambiental de Galicia.
El Seprona ha destacado el peligro de esta granjas como potenciales transmisores de enfermedades pues pueden tener enfermedades y transmitirlas a los tecores a los que son llevados. Además, allí pueden cruzarse con otros animales y aumentar el riesgo de alteración genética y cambio de distribución geográfica que podría producir animales híbridos.
Esta forma de criarlos además puede alterar su estructura social pues en libertad es un animal que vive en grupos familiares liderados por un macho.
