De lo poco que recuerda el piloto del automóvil siniestrado el sábado en Carral en el rally de A Coruña es que cambió de dirección al ver gente en el lateral izquierdo de la carretera, en el lado opuesto a donde ocurrió el accidente, que tuvo como consecuencia el fallecimiento de siete personas, además de 15 heridos de diversa consideraciónfallecimiento de siete personas. El joven está "destrozado" y no tiene apenas recuerdos de lo que pasó a partir de ese instante.

La investigación investigación deberá aclarar por qué el joven perdió el control del Peugot 206XS, escapándose al lado contrario al que se preveía por la inercia, en un tramo no especialmente peligroso. También cuál era la disposición del público en el momento del siniestro y si había espectadores donde, en principio, no podían estar. Era un tramo muy próximo al núcleo Carral y la prueba automovilística era una de las atracciones principales de la fiesta. Se acercó mucha gente al lugar, más de un centenar de personas. Según testigos, la Guardia Civil retiró a espectadores de zonas peligrosas prohibidas y resta saber si estos lugares volvieron a ser ocupados.

El piloto está "destrozado"piloto , también por su relación con algunas de las víctimas, de una edad similar y con las que compartía afición. La declaración ante la autoridad judicial todavía no se ha materializado y él apenas ha podido relatar, según fuentes próximas a su entorno, que intentó enderezar el coche al ver a espectadores al entrar en la recta. El joven estuvo ingresado día y medio y para él tuvo palabras, en la concentración del domingo, el alcalde de Carral, de donde procedía, como cuatro de los fallecidos en el siniestro. José Luis Fernández Mouriño hizo mención al chico, en un momento de "gran dolor y pesar".

Los testimonios son dispares a la hora de responder si el tramo de Paleo cumplía las medidas de seguridad. Varias personas dicen que el efectivo de Protección Civil instó varia veces al público a alejarse de la carretera y otros que la Guardia Civil ordenó despejar solo la zona de enfrente, que era lo que se preveía peligroso, en un tramo recto tras una curva. La Dirección General de Tráfico sostiene que se "comprobó la seguridad de rally" y "todo era correcto". Agentes del Instituto Armado lo atribuyen a una "fatalidad".

El menor ingresado, a planta

El único menor que permanece ingresado en el hospital Materno Infantil Teresa Herrera evoluciona favorablemente y ayer fue dado de alta en la UCI para pasar a planta, según informaron fuentes hospitalarias. Cuatro pequeños ingresaron en el hospital víctimas del siniestro del sábado. Dos ya habían sido dados de alta y una tercera, la niña carralesa de diez años, falleció el domingo por la noche y recibió sepultura ayer.

En cuanto al estado de salud de los otros tres pacientes ingresados en el Complejo Hospitalario de A Coruña, todos adultos, no hay cambios con respecto al lunes. Uno de los heridos sigue en la UCI con pronóstico grave pero estable y otros dos en planta, donde evolucionan favorablemente.

La Federación de Asociaciones Vecinales de A Coruña y el área metropolitana trasladó ayer su "pesar" a las familias de las víctimas del rally, tras el accidente registrado el sábado a su paso por Carral. En un comunicado, la entidad vecinal muestra "su pesar a las familias y amigos" de los fallecidos, al tiempo que desea "la pronta recuperación de todos los afectados" por lo que califica como "dramático accidente". La federación hizo público el comunicado ayer, cuando se enterró a la séptima víctima mortal del siniestro.