El tráfico en la avenida Guevara de Oleiros, entre la rotonda de Santa Cristina y el monumento del Che, se restringirá aún más a partir del próximo 15 de enero a causa de las obras de instalación del sifón, el colector que baja por esta vía hasta el puente de A Pasaxe para llevar las aguas residuales y aliviar los bombeos de la ría. El alcalde, Ángel García Seoane, anunció que a partir del 15 de enero habrá un tramo de la avenida en el que solo habrá un carril para la circulación, por lo que los vehículos circularán de forma alterna, con regulación por semáforos de obra, lo que originará "tiempos muertos y colas fuertes".

Ahora mismo en este tramo entre las dos rotondas hay dos carriles, uno por cada sentido, ya que se demolió una parte de la acera para aumentar el ancho de la calzada y permitir el paso de la doble circulación mientras se realizan las obras en la margen derecha si se mira en dirección a A Coruña.

García Seoane aprovechó para recomendar que los centenares de usuarios que utilizan a diario esta vía, sobre todo de gente que trabaja en A Coruña, vayan "practicando desvíos", entre los que recomendó, para los vecinos que vengan de Santa Cruz y Mera, que en la rotonda de Che Guevara cojan a la izquierda para subir al Alto de Perillo y después bajen por la Segunda República y giren a la derecha hacia el mercado municipal cuando estén a la altura de la fuente. Una vez ahí deben bajar a la calle Rosalía de Castro y desde ahí dirigirse a la rotonda de Santa Cristina para girar hacia A Coruña. También aconsejó utilizar, para el resto del tráfico, el desvío por Montrove, por Os Regos, para ir a la Nacional VI.

En Santa Cruz existen carteles de obra que aconsejan coger la vía ártabra para no cruzar por Santa Cristina, lo que no hace ningún conductor debido al gran rodeo que supone y porque se encuentra con tráfico denso en O Carballo.

A favor de la rotonda

Seoane criticó que la Plataforma pola Humanización da avenida das Mariñas no esté de acuerdo con el proyecto de Fomento de ejecutar una rotonda con túnel debajo en el cruce de Sol y Mar. Afirma que se dicen "burradas" y que él no va a "participar en ninguna acción que impida o retrase esas obras", en referencia a posibles movilizaciones que pueda hacer la entidad.