El Concello de Bergondo, la Comunidad de Propietarios del Polígono de Bergondo, empresas y 131 afectados particulares han alegado contra el proyecto del Ministerio de Fomento de construir una rotonda en el cruce de la Nacional VI con la carretera a Ferrol, en Guísamo.

El Ayuntamiento bergondés admite que la construcción de la glorieta es una obra "necesaria y urgente", pero ve preciso incluir una serie de mejoras en el proyecto redactado por la Demarcación de Carreteras para "superar los inconvenientes de circulación que presenta".

El Concello advierte de que el proyecto incluye carriles de servicio en dirección A Coruña-Betanzos, Betanzos-Ferrol y Ferrol- A Coruña que limitarán la circulación de los vehículos de, al menos, tres empresas que tendrán que usar obligatoriamente el carril en dirección Ferrol-A Coruña para acceder y salir de sus instalaciones.

Para usar este carril de servicio, alegan, los vehículos que vengan desde Betanzos o A Coruña deben entrar en el parque empresarial y cambiar allí de sentido. "Esto ocasionaría un aumento de tráfico en las vías del polígono, con el correspondiente deterioro del pavimento y las dificultades de circulación que se presentarían para el transporte pesado, al no estar adaptadas las vías para este tipo de maquinaria", inciden desde el Ayuntamiento en sus alegaciones.

El Concello y los empresarios plantean a Fomento la creación de una rotonda en la entrada del polígono, en la carretera AC-164, para facilitar los cambios de sentido sin tener que entrar en el parque empresarial.

Otra mejora que proponen desde el Consistorio es la construcción de una pequeña glorieta a la altura de la empresa Eurofruit para articular la circulación en la zona aprovechando la rotonda proyectada en el cruce con la carretera de Cambre. El Concello sostiene que su ejecución permitiría suprimir las isletas centrales y aumentar las plazas de aparcamiento en el entorno.

El Ayuntamiento reclama también una actuación en el entorno del Centro de Formación Agroforestal de Guísamo y de las naves de O Carballal para facilitar los giros a los usuarios que circulen desde Betanzos o Ferrol y a los vehículos de las empresas, dado que con el proyecto inicial tendrían que ir hasta Espíritu Santo o utilizar las calles del polígono para cambiar de sentido. Las sugerencias del Concello van en la línea de las presentadas por la Comunidad de Propietarios del Polígono y de la Asociación de Empresarios (ASEB) y de los 131 afectados particulares.

Según informó ayer el Consistorio, todos consideran que se limitaría en exceso el acceso y la salida de las empresas situadas en las fincas colindantes a la rotonda, lo que les obligaría a utilizar las infraestructuras del polígono para realizar los cambios de sentido.

El Gobierno local incidía ayer en que la urgencia de actuar en este punto peligroso no debe llevar a aprobar un proyecto con los inconvenientes señalados. "No se debe permitir que las empresas no tengan accesos viables y que, al mismo tiempo, se generen dificultades para los otros tráficos de la zona", argumenta. El Ejecutivo recuerda que se trata de un problema de seguridad de ámbito provincial y que una de las acciones que se debería aprobar de manera inmediata es la supresión o rebaja de los peajes de Guísamo, Santa Marta y Macenda.

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