El futuro de la antigua fábrica de la luz de Betanzos sigue en el aire. Este edificio, en proceso de ser declarado monumento, languidece a la entrada de la ciudad. La empresa propietaria, General de Edificios e Solares, de Fenosa, desoye al Concello y se niega a ejecutar los trabajos de apuntalamiento para evitar su derrumbe.

Tras anunciar el Ayuntamiento la apertura de un expediente sancionador por incumplimiento, la compañía ha informado de la interposición de un recurso judicial contra la orden municipal. Según informan desde Fenosa (ahora Naturgy), el recurso se interpuso el pasado 19 de julio y la empresa ha solicitado como medida cautelar la suspensión de la orden de apuntalamiento dictada por el Concello.

El recurso de General de Edificios y Solares ha sido admitido a trámite y el juzgado dio un plazo al Concello para contestar sobre la medida cautelar solicitada por la empresa. El Concello confirmó ayer la existencia de este pleito, pendiente aún de resolución judicial. Desde el Consistorio mantienen su intención de abrir un expediente sancionador a la empresa por el incumplimiento de las órdenes dictadas en 2017.

El embrollo administrativo y judicial que rodea este edificio complica su rehabilitación, todavía sin fecha. El inmueble presenta ya un avanzado estado de deterioro, parte de la cubierta sucumbió hace ya años y el BNG ha reclamado medidas inmediatas ante el temor de que no resista otro invierno. La decisión de la empresa titular de reclamar nuevamente su declaración de ruina ha disparado las alertas y los nacionalistas reclaman al Ejecutivo municipal que inicie los trámites para expropiar esta antigua fábrica modernista y garantizar su conservación.