Si el barro estaba presente ayer en la calzada, aceras, jardines, plaza río y bahía de Santa Cruz, los vecinos creen que aún puede empeorar por el frente de lluvias que se prevé para los próximos días. Tras las restricciones por las obras del tanque de tormentas y de la rotonda de la avenida Concepción Arenal, de nuevo este núcleo oleirense está de nuevo en plena actividad. Acaban de iniciarse los trabajos de renovación de la red de tuberías de abastecimiento de agua potable y es necesario cavar zanjas y realizar movimientos de tierras.

Esta obra se adjudicó a Arias Infraestructuras por 151.000 euros el pasado mes de mayo pero aún se ha comenzado ahora. Se trata de cambiar todas las tuberías porque las actuales tienen más de treinta años y sufren continuas roturas. La renovación va desde Meixonfrío hasta la parcela del antiguo Maxi. Esto obliga a cavar zanjas, como las abiertas ayer ya en el parque Luis Seoane, para disponer estos tubos. El trasiego de maquinaria, pequeñas retroexcavadoras y dumper, junto con los trabajos a mano de operarios con palas y picos, unido a las lluvias de la noche anterior, hicieron que el centro urbano de Santa Cruz estuviese ayer lleno de barro.

La zona en peor estaba era la parcela vacía encima de la plaza Esther Pita, al ser lugar de acopio de tierra, vallas y tramos de tubería lista para instalar. La parte de abajo de la plaza, antes del río, tampoco parecía ayer un jardín debido a la maquinaria y las roderas. La obra de renovación de la red incluye en este punto la instalación de una boca de riego y una fuente. Los operarios ayer también estaban mejorando, con acopio de tierra, la senda que bordea este cauce hasta el paseo marítimo.

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Barro en Santa Cruz por obras de la red de agua y arrastres de tierra

Tierra también era ayer, una vez más, lo que bajaba por el río hasta la playa y teñía de marrón la bahía de Santa Cruz. Hace semanas que la obra del campo de golf de Xaz genera tierras que bajan por este regato al desbordarse las balsas previstas por la empresa, algo que ya hizo intervenir a la Xunta.

Y no era tierra, pero sí arena, lo que se desbordaba de la obra de ejecución del edificio de lujo que promueve Caamaño en la esquina de Concepción Arenal con el parque Luis Seoane. En la fachada que da a la calle Santiago Gómez una pila de arena había traspasado la valla.

Las vallas también abundaban ayer en torno al hotel que se levanta en el lugar del viejo Maxi. Si antes cortaban parte de la acera, con protesta de vecinos por los carritos de los niños y el paso de silla de ruedas, ahora se ha colocada otra más exterior, eliminando parte del aparcamiento y la zona de carga y descarga y dejando un estrecho paso peatonal protegido con las barreras blancas y rojas New Jersey.

Esta obra de mejora de la red de agua incluye mejoras en la iluminación, con colocación de luces LED. Al finalizar se repondrán aceras y césped y se repintarán señales viarias y pasos peatonales.