El nuevo sifón de Perillo cumple las expectativas. Técnicos de la Xunta han comprobado con los recientes episodios de lluvias abundantes que la nueva canalización funciona como se preveía y ha logrado evitar los vertidos a la ría de O Burgo que se producían por los desbordamientos, según aseguró ayer el director de la obra, David Hernáez, en una visita junto a la conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, a la zona. El responsable de la obra del sifón, que entró en funcionamiento el pasado mes de septiembre, sostiene que la nueva infraestructura ha logrado frenar los vertidos a la ría.

Hernáez explicó que sobre todo en el bombeo de O Temple se producían muchos "alivios" en momentos de fuertes lluvias y el sifón fue la solución que se ideó para aliviarle la carga, y funciona. Aún así, ponen en marcha el bombeo viejo de A Pasaxe cuando llueve mucho. Con el sifón ahora circulan 2.200 litros por segundo de aguas residuales de Oleiros y Cambre hacia la depuradora de Bens pasando por debajo de la ría.