El enlace de la tercera ronda con la AP-9, el llamado vial 18, está condicionado por la ampliación de dos a tres carriles por sentido en la autopista, que debería ejecutarse al mismo tiempo que la puesta en servicio del propio ramal de conexión y antes del año 2031, según señala el anteproyecto de la infraestructura aprobado por el Ministerio de Fomento y en exposición pública desde este mes para el periodo de alegaciones.
Los cálculos técnicos realizados para el proyecto revisado, tras haber sido frenada la tramitación inicial por errores en el proceso, establecen que entre 2031 y 2036 -a partir del décimo año de la puesta en servicio prevista para el vial 18, en 2021- se "agotará la capacidad" de la AP-9, por lo que la autopista "debería ser ampliada". El anteproyecto no pronostica en cambio la necesidad de hacer modificaciones en la AC-14, la tercera ronda, que alcanzaría un nivel de servicio "igual o mejor" que el actual.
El diseño del proyecto, en resumen, tiene la consideración de "adecuado". Con la referencia de los datos sobre los crecimientos de tráfico hasta el año 2017, la intensidad media diaria (IMD) de vehículos que prevé el anteproyecto en el tronco del vial de conexión durante el periodo 2021-2041 va de los 19.859 vehículos ligeros en el primer año a los 32.794 el último, con un salto de los 761 a los 1.200 en el caso de los vehículos pesados.
El nuevo trazado propuesto por Fomento para el vial 18, el que discurre más al norte y prevé un presupuesto de 30,5 millones de euros, de 1,4 kilómetros, presenta otra importante novedad, la incorporación de un falso túnel para minimizar el impacto sobre el colegio Andaina, próximo al vial. También supone expropiar una casa más que el primer recorrido que propuso el Ministerio, seis en total.
El Ayuntamiento de Culleredo aseguró el pasado 9 de enero que encargaría de inmediato un estudio sobre el anteproyecto para determinar si presenta alegaciones, como hizo con la primera propuesta. El plazo para alegar termina el próximo 4 de marzo.
