Una mujer que cogió sin permiso el teléfono móvil de una conocida durante un partido de tenis disputado en Oleiros para leer los mensajes de la aplicación de WhatsApp que había intercambiado con el entonces abogado de su todavía esposo, del que estaba en proceso de divorcio en aquel momento, y después se los remitió a su correo electrónico ha sido condenada a un total de catorce meses de cárcel. La sentencia ha sido emitida por el Juzgado de lo Penal número 3 de A Coruña y ratificada por la Audiencia Provincial. A la acusada se le condena por un delito de revelación de secretos.

Los hechos se remontan al 1 de agosto de 2014, cuando la acusada, nacida en 1971, presenciaba un partido de tenis en una grada de las instalaciones del Club de Tenis Coruña, en San Pedro de Nós. El fallo de la Audiencia señala que la ahora condenada se percató de que una conocida "se levantaba para acercarse a la pista y se olvidaba en la grada su móvil" y que aprovechó ese momento para cogerlo y leer "una conversación confidencial" de WhatsApp. También recoge que "de este modo" la mujer "leyó una conversación confidencial grabada que había mantenido días atrás" con el abogado de su esposo durante el divorcio. El fallo de la Audiencia ve probado que posteriormente se envió las conversaciones registradas entre diciembre de 2012 y julio de 2014 a una cuenta de correo electrónico.

La Audiencia modifica la sentencia de primera instancia para ordenar a la condenada a pagar una indemnización de 1.000 euros al abogado que formó parte de la conversación. El fallo además mantiene la compensación de 1.500 euros a favor de la mujer a la que le cogió el móvil.

La sentencia de la Audiencia considera que el juez de primera instancia dictó una resolución "acertada", lógica y "coherente" y que las pruebas son abundantes. Testigos que estaban en la grada de la pista de tenis de Nós aseguraron que la condenada "se hizo con el teléfono móvil" y "que tal conducta no tenía otro propósito que descubrir conversaciones personales e íntimas de esta". Las personas que estaban presentes en las gradas también afirmaron que la mujer les llegó a decir que el móvil era suyo, "llegando a pasar algo de tiempo hasta que lo devolvió" a su verdadera dueña, según indica la sentencia de la Audiencia Provincial.

La propia acusada reconoció durante la celebración de la vista que las conversaciones de WhatsApp "se las remitió alguien a su terminal", según el fallo.