La plaga del picudo rojo que el pasado mes de enero mató la palmera de la Casa de las Chinchillas en A Pasaxe, un ejemplar centenario y protegido, no tiene freno en Oleiros. Un ejemplar que está casi frente a este de Perillo también corre peligro, tiene la copa seca y desmochada. En la calle de O Paraíso, también en esta zona de Perillo, existe otra palmera totalmente seca. El picudo, un coleóptero, también mató dos ejemplares en la localidad de Mera. El Concello ya mostró su preocupación por esta situación porque también posee varias palmeras municipales.