La pandemia no solo ha paralizado competiciones y dejado a deportistas parados, sino que también ha ofrecido otras posibilidades a algunos. La crisis sanitaria paralizó las competiciones de patinaje de velocidad, que se han ido reanudando aún ahora, pero la Federación Española de Patinaje sobre Hielo ofreció a algunos de los mejores sobre ruedas, la alternativa de probar sobre una cuchilla. Dos patinadores gallegos, del Rabadeira de Oleiros, Manu Taibo y Marcos Vicos, fueron elegidos por la selección española para unas estancias de entrenamiento en Europa. Los buenos tiempos de Taibo en 500, 1000, 1.500 y 3.000 le han metido en la selección para participar en la Copa del Mundo. Ayer este joven de 16 años estudiante de bachillerato en el instituto María Casares, que fue oro europeo en 2019, participó en su primera competición sobre ruedas desde hace un año, desde el confinamiento, en el Campeonato Gallego Autonómico en O Burgo.

“Tenía amigos que habían probado ya el hielo y me contaban que muy bien pero nunca habría pensado que un día lo haría. Desde la selección española me llamaron, por los tiempos que tenía en rueda y me preguntaron si estaba interesado y acepté. Estuvimos entrenando en Alemania, Italia y Polonia y ahora ya formo parte de la selección”, explica Manu Taibo.

Este joven deportista va a simultanear la rueda con la cuchilla porque no se pisan, una disciplina tiene las competiciones más hacia el verano y la otra en invierno. De hecho su temporada como patinador de hielo ya terminó el pasado febrero.

“La seleccionadora me dijo que me había adaptado rápido al hielo. Si alguien te ve patinar dirá que es prácticamente lo mismo pero es otro mundo, es un cambio total, cambian muchos aspectos técnicos. Por ejemplo sobre hielo tienes que empujar el patín porque la cuchilla tiene que cortar el hielo, sobre ruedas no es así. Además en hielo corres más tú solo, en rueda vas en pelotón a veces hasta treinta deportistas”, señala. Si se le pregunta si prefiere la rueda, sobre la que patina desde los cuatro años, o la cuchilla, le cuesta elegir. “Las dos me gustan, pero quizá elegiría las ruedas. El hielo, al ser olímpico, tienes más facilidades”, apunta. Afortunadamente no tiene que elegir. Ahora se subirá a las ruedas y en septiembre retomará el patinaje sobre hielo.

Las competiciones y estos entrenamientos, con estancias fuera de hasta veinte días, no son fáciles de compatibilizar con los estudios aunque este patinador lo consigue con ayuda de sus compañeros. “Me dejan los apuntes y otras veces me explican algunas clases si son cosas más complicadas, incluso me pasan una foto de los temas”, subraya.

Para un deportista que además ama la velocidad, un confinamiento es aún más duro. “Hicimos mucha bici estática porque entrenas los mismos grupos musculares, abdominales para mantener la forma. Yo en casa salía al jardín, hacía ejercicio físico y rodillo. Y limpiaba mis patines todo el tiempo, más que nada por tocarlos”, cuenta.

Manu Taibo tiene ganas de estrenar la pista que el Concello de Oleiros construye en Bastiagueiro, casi terminada. “Va a ser muy interesante porque tiene un trazado un poco distinto al tradicional, de cuchara. Ahora tenemos que ir a entrenar a la pista de Betanzos o al parking del Decathlon de Iñás pero no es lo mismo. Tengo ganas de probarla”, afirma.