El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, advirtió ayer de que el Ayuntamiento ha emitido “informe negativo”, que ha trasladado a la Subdelegación del Gobierno, respecto a la petición de la Asociación Víctimas del Castrismo para manifestarse mañana sábado al mediodía ante la estatua de Che Guevara en la curva de Nirvana para reclamar el fin de la violencia contra la población y el final de la “dictadura de Cuba”. “Han pedido cortar el tráfico de doce a tres de la tarde. No se puede pisar la zona verde de la rotonda y no se puede cortar el tráfico en una carretera con mucha circulación y más un sábado cuando vienen miles de vehículos a las playas y a la hostelería”, declaró ayer García Seoane.

El regidor apuntó que espera que la Subdelegación del Gobierno “esté a la altura” y no autorice esta protesta en la forma en la que está prevista. Seoane invitó a la organización a concentrarse en la Praza Afundida de Santa Cristina o en la propia playa, entre otros lugares.

García Seoane también destacó que este sábado entran en vigor las restricciones sanitarias debido a la subida a nivel alto del municipio de Oleiros por el índice de contagios, por lo que “no pueden juntarse más de diez personas”, de ahí la dificultad de realizar esta concentración de cubanos.

El primer edil oleirense señaló que “detrás” de este acto está “el PP” que se “aprovecha de dos o tres cubanos”. Agregó que se trata de “una parafernalia con el PP y cuatro amiguetes”.

Este colectivo ya protestó en otras ocasiones contra el monumento al Che desde su instalación en 2008. Han calificado esta escultura de “ilegal” y de ser un “agravio y una persecución a las víctimas del castrismo exiliadas en La Coruña” y piden que el alcalde “condene la violencia terrorista” actual en Cuba.