Nogareda defiende su gestión de la concesión de El Chiringuito y carga contra Portela

La exalcaldesa y líder de Unidos por Sada, María Nogareda, defiende su gestión de la concesión de El Chiringuito tras acordar sobre la bocina del mandato, en vísperas de la jornada de reflexión, ordenar el cese de la actividad del actual concesionario, que tendrá que bajar la persiana el 1 de septiembre, con vistas a sacar a concurso y adjudicar durante esta temporada estival la explotación de este local a pie de playa.

Tras informar este diario de la aprobación de este decreto el 26 de mayo a las 23.06 horas, Unidos por Sada emitió un comunicado para informar sobre “la realidad” de este resolución. La formación que lidera Nogareda subraya que trabajó “desde el primer y último día a la misma velocidad” y que el objetivo del acuerdo era proseguir con los trámites de la licitación.

Como ya detalló este diario, los trámites para iniciar la licitación arrancaron con Benito Portela, que emitió una providencia el 4 de octubre de 2022, unos días después de declarar como investigado en un proceso ya archivado por consentir el funcionamiento de este local con la concesión vencida desde junio de 2017. En su decreto, Portela ordenaba a Urbanismo redactar un informe propuesta relativo a la orden de cese de la actividad y en la que instaba a Contratación a redactar unos pliegos para sacar a licitación la concesión.

Tras la presentación de la moción de censura poco más de un mes después, no volvieron a trascender avances en el expediente. Unidos por Sada subraya que el decreto de Nogareda que fija el cese de la actividad el 1 de septiembre permite autorizar provisionalmente el funcionamiento del local en temporada estival, durante los trámites de la nueva concesión. “Cosa que pudo hacer Portela pero que no hizo”, afirma la formación.

La decisión de Portela de iniciar los trámites para el cese de la actividad de este local suscitó polémica en Sada. Unidos por Sada evitó informar sobre su resolución para continuar con el procedimiento y acusó al líder de Sadamaioría de pretender “desmantelar” El Chiringuito. La formación sostiene ahora que se refería a “no dar cobertura legal a la situación y hacer que desaparezca” .