Estrellas fugaces... y esquivas en el área de A Coruña

Buscar puntos alejados de la luz artificial, como en el Xalo o Cecebre, clave para ver Perseidas

Vista de una Perrseida.  | // L. O.

Vista de una Perrseida. | // L. O. / Sara Vázquez

Demasiada luz en tierra y, además, artificial. La comarca de A Coruña y, por descontado, la ciudad, dificultan una buena observación de las Perseidas que estos días atraviesan los cielos, aunque las zonas menos pobladas e iluminadas por medios humanos ofrecen todavía oportunidades de disfrutar de un luminoso espectáculo que solo puede darse en la oscuridad. El monte Xalo o el entorno del embalse de Cecebre guardan todavía rincones resguardados en una comarca “excesivamente iluminada”, asegura Martin Pawley, miembro de la directiva de la Agrupación Astronómica Coruñesa Ío.

“Hay que aplicar el sentido común. Si el enemigo son las luces, las farolas, vayámonos lejos de ellas”, sostiene Pawley. Apunta que Cecebre o el Monte Xalo pueden ser zonas por las que buscar una opción para observar las Perseidas sin alejarse de la comarca coruñesa. “Pero Cecebre es muy grande y habrá puntos en los que no se vea nada y otros en los que sí. No es tanto recomendar un lugar, como el banco más bonito del mundo, porque eso es para instagramers y no tiene sentido, sino buscar puntos”, aconseja.

Como consejo para localizar un rincón en el que las Perseidas se dejen ver, Pawley señala que el cielo debe verse oscuro. “Si se ve naranja porque se reflejan las luces de la ciudad, no vas a ver nada”, afirma. Además, señala que existen otros factores que pueden entorpecer la visión. “Si vas a una playa apartada y con el cielo oscuro y se levanta la niebla, no vas a ver nada”, apunta. Pawley recuerda que las Perseidas pueden verse ya estas noches y hasta días después del “pico”, que es este sábado, día 12. “Es un arco de días muy amplio. Una semana antes y después del máximo, que es el día 12, siempre se pueden ver”, detalla. Añade que este año la luna, menguante estos días y que será nueva la próxima semana, despejará de su luz el cielo para no eclipsar a las Perseidas.

Una vez lejos de la mundanal claridad, acostumbrar la vista a la oscuridad y tener paciencia son las claves, asegura el experto. “Las estrellas fugaces no son una película de Netflix, que salen cuando tú quieres y donde tú quieres. Hay que hacer un esfuerzo, hacer la vista a la oscuridad, que es algo muy importante que lleva minutos. No puedes esperar salir del coche y a los dos minutos mirar arriba y ver miles de estrellas fugaces. Eso no sucede, sucede en las películas”, advierte.

Pawley invita a vivir una noche de Perseidas como una excepción a la inmediatez cotidiana. “Requiere paciencia, calma, y con los minutos irás viendo más estrellas. No es TikTok, no son 30 segundos de espectáculo, son horas disfrutando en la naturaleza nocturna, en buena compañía, relajadamente tomándose un chocolate, o un café o un té; disfrutar del cielo o del paisaje de la noche”, apunta. “Vas a ver muchas y te vas a perder también muchas porque no estabas mirando al lugar adecuado cuando sale. No se puede predecir que va a salir una cuando tú estás sacando la foto. El cielo no funciona así, felizmente”, asevera y anima a acudir con “buena disposición”.

Suscríbete para seguir leyendo