Sada exige ampliar el BIC a la “unidad del conjunto incontestable” de Cerámicas do Castro

“La unidad del conjunto es incontestable y, en este sentido, es preciso considerar todo el complejo como un proyecto global, en todos sus aspectos: comercial, industrial, cultural y arquitectónico”, sostiene el Ayuntamiento de Sada en sus alegaciones para reclamar que el expediente para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el Museo Carlos Maside se extienda a todo el complejo, reclamación que comparte, y por la que también ha alegado a la resolución de la Xunta, la Asociación Cultural Irmáns Suárez Picallo. “Resulta obvio y manifiesto que las Cerámicas do Castro constituyen el pilar sobre el que se levanta y materializa la idea global que, tanto Isaac Díaz Pardo como Luis Seoane, tenían al respecto de la recuperación de la memoria histórica de Galicia, de su creación cultural y de su resurgir industrial”, asevera el alegado del Concello sadense, con fecha de ayer.

El Ayuntamiento reivindica “la concepción global del proyecto” concebido por Isaac Díaz Pardo y desarrollado de la mano de Luis Seoane y, en la parte arquitectónica, Andrés Fernández-Albalat. Defiende que “el carácter indisociable e indivisible alcanza, de modo evidente, a todo el complejo en todas sus facetas pues, sin el previo nacimiento de las Cerámicas do Castro y el posterior de las de Sargadelos, que conformarían la faceta industrial-comercial del proyecto global y que al mismo tiempo serían el motor financiero de este, ni el Laboratorio de Formas, ni Edicións do Castro, ni el propio Museo Carlos Maside habrían sido posibles”.

El Ejecutivo sadense asegura, además, que la extensión de la declaración de BIC a todo el complejo no obstaculizará la actividad de la fábrica y apunta que el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Sada blinda el conjunto y su actividad, al clasificar el suelo de la fábrica como urbano de uso industrial. El Ayuntamiento y la entidad cultural inciden en que “la continuidad de la actividad industrial está plenamente garantizada” y “la declaración, con la categoría de monumento, del conjunto de Cerámicas do Castro en nada perjudicaría ni a la actividad industrial existente ni a las trabajadoras y trabajadores”, sostiene la asociación.

El Concello considera “evidente e inequívoco que, si el conjunto de la Fábrica de Sargadelos es considerado y caracterizado como un proyecto singular y único, las Cerámicas do Castro lo son, cuando menos, en el mismo grado”, argumento que coincide en esgrimir Irmáns Suárez Picallo en sus alegaciones, firmadas también con fecha de ayer y que apelan a la “coherencia de la Dirección Xeral de Patrimonio. “No se puede entender como en Cervo se contempló la globalidad y en Sada la declaración como BIC se restringe al museo”, alega la entidad cultural.

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La asociación propone una alternativa a declarar museo todo el complejo: plantea la opción de que solo el museo Carlos Maside se considere monumento, como ya ha incoado la Xunta, y el resto del complejo sea declarado BIC con la categoría de sitio histórico. “No es razonable que el germen, la matriz del inmenso proyecto cultural e industrial de Isaac Díaz Pardo, quede sin reconocimiento de Bien de Interés Cultural en su conjunto, limitando la declaración BIC a una parte del complejo y dejando sin reconocer el resto de las singularidades constructivas, espaciales y funcionales que sobreviven, de los lugares que albergaron Edicións do Castro, los laboratorios, los cursos internacionales de cerámica...”, señala Irmáns Suárez Picallo. “Resulta obvio que el conjunto de Cerámicas do Castro, al igual que sucede con el de Sargadelos-Cervo, constituye una unidad indivisible integrante del proyecto que, tanto en el plano empresarial-artístico, de la mano de Luis Seoane e Isaac Díaz Pardo, como en el plano arquitectónico, de la de Fernández-Albalat, merece una consideración de conjunto que no admite divisiones ni es susceptible de ser observado desde una visión individualizada de cada uno de los elementos que conforman el conjunto”, argumenta el Concello.

La asociación aboga en sus alegaciones por que la ampliación del BIC atienda a la “necesidad de preservar la verdad histórica y la obra de Isaac Díaz Pardo”, así como a “visibilizar la figura de Carmen Arias de Castro Mimina, sin cuya participación activa no sería posible la obra de Isaac tal y como es conocida”. “Están suficientemente acreditadas y fundamentadas las razones por las que cabe calificar como ‘creación cultural singular’ el complejo de Cerámicas do Castro, así como la más que evidente relación y afectación históricas desde su inicio con el patrimonio cultural de Galicia”, asevera la asociación.

Las alegaciones llegan con el Museo Carlos Maside cerrado. Bajar de nuevo la verja, pasados menos de dos meses de la reapertura, fue la respuesta del grupo empresarial de Sargadelos a la petición del Concello de extender el BIC a todo el complejo. El administrador único, Segismundo García, acusó al Ayuntamiento de poner “palos en las ruedas” a la empresa en Sada y anunció que se llevará a Cervo inversiones previstas en O Castro, como la nueva división empresarial. El Ayuntamiento niega hostilidades y alega que “la ley hay que aplicarla, independientemente del dinero que tengas”.

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