Familias de alumnos del colegio de O Graxal se concentran hoy para exigir más limpieza

Familias de alumnos del colegio de O Graxal se concentrarán a las puertas del centro a las 09.00 de este martes para denunciar la “insuficiente” limpieza del recinto. Padres de pequeños protestan desde hace meses por la falta de higiene en las instalaciones, en las que una única persona de la empresa que presta el servicio, Jardincelas, realiza tres horas y veinte minutos al día de limpieza, ya que los otros dos empleados asignados al centro se encuentran de baja, lo que se sumó al ERTE aplicado por la empresa —que achacó a los meses de retraso en los pagos por parte del Concello de Cambre— y a la huelgaque convocó la plantilla por atrasos en el abono de las nóminas, suspendida desde este lunes.

Migas y restos de comida por el suelo, bolas de polvo o pelusas y pelos en los suelos son las muestras más comunes y visibles de que el centro necesita más limpieza, detallan los familiares de alumnos. Advierten de los problemas y crisis que han sufrido niños y docentes alérgicos a los ácaros y del riesgo para los pequeños con alergias alimentarias graves, que pueden sufrir importantes complicaciones de salud si entran en contacto, por ejemplo, con restos de cacahuete en el suelo. En especial, temen por los niños de Infantil, área que ven más afectada por los restos de comida, precisamente por la menor destreza de los pequeños en esas edades.

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Madres y padres de alumnos aseguran que la limpieza en el colegio se ha visto afectada por “un cúmulo de circunstancias”. Detallan que, al término del estado de alarma por la pandemia, se realizaban once horas de limpieza al día, divididas entre tres personas, y aseguran que desde entonces ha aumentado el número de alumnos pero, en lugar de incrementarse las labores para limpiar el centro, la huelga y las bajas las han reducido. Ven “insuficiente” tres horas y veinte minutos de trabajo diario para un centro con “alrededor de 400 alumnos” y apuntan que la dirección les ha comunicado que, por la subida del número de niños, estima en que serían necesarias unas 15 horas al día.

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La situación de ERTE de la empresa, explican familiares de alumnos, impide la cobertura de bajas. El Ayuntamiento, aseguran, tratar de paliar la situación reorganizando tareas del servicio que presta la empresa para el Concello y enviando a reforzar la limpieza en el centro escolar a trabajadores asignados a otros inmuebles municipales con tres horas diarias más, hasta sumar seis. También insuficiente, lamentan los progenitores.

El Concello, apuntan, les ha explicado que no puede hacer más y que trabaja en los pliegos para sacar a contratación el servicio, que lleva años en precario. Lamentan que sus escritos a la Inspección de Educación de la Xunta no han obtenido respuesta. Y aseguran que la dirección del centro ha intentado también por varias vías atajar el problema. Durante la huelga, el equipo directivo envió peticiones al Concello y la empresa de incrementar los servicios mínimos fijados, que consideraba “muy escasos”, y avisó de que la falta de limpieza comenzaba a “ser preocupante”.

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