El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, mostró ayer el "apoyo incondicional" de su gabinete al Gobierno central para resolver el secuestro del atunero vasco Alakrana y evitó entrar en polémicas sobre la gestión de la crisis para centrarse en lo "prioritario": la liberación de los tripulantes para que regresen cuanto antes "sanos y salvos" a sus casas. La postura del presidente gallego, que en una entrevista en Los desayunos de TVE exigió también al Gobierno que permita que exista representación de la Xunta en el comité de crisis que gestiona la solución al secuestro, contrasta con la secretaria general de su partido, María Dolores de Cospedal, quien ayer criticó duramente la gestión de la crisis y reclamó al Ejecutivo que haga "lo que tiene que hacer" para conseguir la liberación de los marineros.

Alberto Núñez Feijóo trasladó al Ejecutivo su malestar por enterarse de lo que está ocurriendo con el Alakrana a través de los medios de comunicación y calificó de "arriesgado" el traslado de los piratas detenidos a España, pero ha evitado la polémica para incidir en la necesidad de liberar cuanto antes el atunero Alakrana, en cuya tripulación hay ocho gallegos, dos de los cuales fueron trasladados el jueves a tierra junto con otro tripulante vasco. Feijóo compareció ayer ante la prensa en Madrid tras suspender el viaje oficial que tenía previsto iniciar ayer a Miami para asistir, entre otras cosas, a la entrega de premios Españoles del año, que otorga la Cámara de Comercio de España en este Estado norteamericano. "No es posible ejercer las competencias de autogobierno en un momento en que varios ciudadanos están en una situación gravísima, sin tener información de primera mano y en tiempo real de lo que está haciendo el Estado", subrayó.

El presidente gallego se puso en contacto con la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, para mostrarle su preocupación por la evolución del secuestro y solicitarle más información de lo que está ocurriendo. En la conversación, Feijóo pidió a De la Vega la inclusión de la Xunta en el "gabinete de crisis", que sea "más transparente" con el Ejecutivo autónomo y las familias de los secuestrados.

Núñez Feijóo señaló que su objetivo es apoyar y dar toda la información de que dispongan a las familias que están viviendo una situación dramática y cuya incertidumbre se ha agravado en las últimas horas. Sobre la exigencia de los piratas de que se liberen a sus compañeros detenidos, Núñez Feijóo desveló que ya en su día transmitió a la vicepresidenta su "sorpresa" por su trasladado a España, por el hecho de que había una fragata en la zona en la que se podían haber quedado. Tras opinar que la decisión de poner a los piratas a disposición de la Justicia fue "muy arriesgada" y "no tiene vuelta atrás", el presidente gallego ha lamentado que los "efectos secundarios" de este hecho se estén sufriendo ahora y no vengan a mejorar un desenlace feliz en esta cuestión.

Preguntado sobre si es partidario de que se liberen a los piratas para cerrar el secuestro, ha sido tajante: "No hay un bien jurídico protegido superior a la vida de la tripulación. Esa es mi opinión y se la he trasladado (a De la Vega) con mucha claridad".

María Dolores de Cospedal exigió ayer al Gobierno "haga todo lo que tenga que hacer" para que los tripulantes del atunero "Alakrana" vuelvan "sanos y salvos" con sus familias y para que "esto no se vuelva a repetir nunca". Cospedal reclamó "apoyo y solidaridad" con las familias de los tripulantes del atunero y acusó al Gobierno de haber se equivocado "desde el principio" en la gestión de esta crisis y de hacer cosas "como no se tenían que hacer", de modo que, más de un mes después del secuestro, la situación es igual "o peor".