Los barcos que faenan en la reserva de interés pesquero de Os Miñarzos, en Lira (Carnota), denuncian la entrada constante de furtivos en esta zona protegida. "Todo aquel que quiere entra sin ningún tipo de control. Los dos pulmones de la reserva (las dos zonas en las que está terminantemente prohibido faenar durante todo el año) están llenos de pescadores ilegales", explica el patrón mayor de la localidad, José Mariano Lago, que apunta además a una decadencia de los recursos pesqueros. "La Xunta eliminó la vigilancia porque era muy costosa. Sin ningún control, ¿quién respeta las normas? Nadie", lamenta.

Los armadores confían en que la situación mejore con la ampliación de la reserva, un proyecto todavía sin concretar. "Con este cambio seríamos ocho cofradías y podríamos permitirnos pagar la vigilancia. Mejorarían las cosas", concluyó.