Hace casi tres semanas. Y desde entonces, como si el agua siguiese su curso en un río que va como tal y desemboca en el mar. Casi tres semanas para comprobar que, pese a lo dicho, todo sigue igual. Como la vida a la que cantó el inefable Julio Iglesias, embajador que fue de Galicia a cambio de un aporte vitamínico.

Ya, sí: hablamos de la secretaria general técnica de la Consellería do Mar, Isabel Concheiro, que el pasado 8 de marzo de 2016, dijo en el Parlamento gallego (en relación a los marineros y armadores gallegos que trabajan en buques de bandera francesa) que la Xunta "adoptó una posición activa para lograr la firma de un convenio que defienda de la mejor manera posible los intereses de los marineros gallegos" y permita que puedan seguir cotizando en España.

"Caca de la vaca, o falar non ten cancela", frase expeditiva con la que mi abuela Maripepa zanjaba cualquier cuestión ante promesas que, sabía, no se cumplirían.

Galicia no tiene competencias en el asunto, el Instituto Social de la Marina (ISM) no halla una salida y los gobiernos de España y Francia no caminan rumbo al encuentro.

La realidad es que el Gobierno central es quien tiene competencias en esta materia, y el Gobierno central sigue "en funciones".

¡Hale, hop!

En vista de que todo aquí está en funciones y nada funciona, armadores y tripulantes han optado por lo que más duele: cotizar "voluntariamente" en Francia. Nadie les ayudó a hallar una vía de entendimiento que pudiera ser, por ejemplo, figurar de alta en una empresa española que opera en Francia, pero cotizando aquí, en su país de origen y residencia.

¿Quién da más...?

La Xunta no conoció este problema hasta octubre de 2015. Dijo ser consciente de su importancia tanto para los marineros como para los armadores "e incluso para el propio Estado español"; pero se ve que también el Estado, al igual que el Gobierno, está en funciones.

Menos mal que el presidente de la Xunta -según Concheiro- manifestó su preocupación y solicitó formalmente con una carta a la ministra de Empleo (en funciones), Fátima Báñez, "su interés".

"Caca de la cava, o falar non ten cancela". Abofé.