El Servizo de Gardacostas de Galicia (dependiente de la Consellería do Mar) y otras fuerzas de seguridad como la Guardia Civil y la Policía Autonómica incautaron durante el pasado año un total de 290 toneladas de pescado y marisco ilegal en la comunidad gallega, un 66% más que en 2017, cuando se decomisaron 175 toneladas. Esta cantidad es la más alta desde 2013, cuando hubo un pico de casi 242,4 toneladas requisadas, según los datos proporcionados por la Administración gallega, que se remontan a 2011.
El incremento de los productos pesqueros ilícitos decomisados no se repite en el resto de apartados. Las incautaciones descendieron a 22.408 por las 24.098 que se produjeron hace dos años, una caída del 7%. Las infracciones detectadas sufrieron una caída del 16%, ya que en el pasado ejercicio se registraron 2.991 por las 3.555 del 2017. También se desarrollaron menos inspecciones, concretamente 11.720, un 4,6% menos que las 12.285 realizadas hace dos años, según los datos proporcionados por la Consellería do Mar.
Los agentes de los diferentes cuerpos del orden decomisaron el año pasado el 71,5% del pescado en el área que va de A Coruña hasta Malpica (zona 3), al superar las 207 toneladas solo en esta franja de la costa coruñesa. La cifra equivale a 172 veces la de 2017, cuando se habían incautado 1,2 toneladas de pescado y marisco ilegal.
La zona 5, que comprende desde Fisterra hasta Porto do Son, fue la segunda en la que más cantidad se requisó a pesar del descenso en el total incautado del 71%, ya que en 2017 se habían decomisado 111 toneladas por las 32 del pasado ejercicio.
Otras áreas en las que la extracción o el transporte ilegal de productos de la pesca se transformaron en incautaciones relevantes fueron la 7 (Arousa Sur), con 12,2 toneladas, y la 8 (de San Vicente a la ría de Pontevedra) con casi 9 toneladas requisadas durante 2018.
Los registros de incautaciones tuvieron su foco en las Rías Baixas, sobre todo en la provincia de Pontevedra. Los agentes decomisaron entre San Vicente y la ría pontevedresa más de 5.000 útiles de pesca. La zona 7, de Arousa Sur, fue la segunda con más aparejos intervenidos, mientras que entre Lugo y Ferrol solo se incautaron 161.
Las zonas del interior son las que menos actividad registraron. El año pasado se decomisaron 1,07 toneladas en las áreas no costeras frente a las 4,1 de 2017.
