La mortalidad diaria por la acción del coronavirus SARS-CoV-2 registró este fin de semana su dato más grave en lo que va de la pandemia al registrarse 15.000 muertes por COVID en las 24 horas, mientras que varios países ya aplican agresivos planes de vacunación.

Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), que informó de esa cifra en su tradicional conferencia de prensa diaria desde Ginebra (Suiza), es un récord que sitúa el total de decesos por la pandemia en 1,9 millones. La agencia del sistema de las Naciones Unidas afirmó además que también se registraron 800.000 nuevos contagios del patógeno, una de las cifras diarias más altas en más de un año de crisis sanitaria, y que deja el total global en 87,5 millones.

Por su parte, las cifras dadas por la Universidad Johns Hopkins tienden a acercarse a las de la OMS, ya que registran que en el mismo periodo de tiempo fallecieron 14.858 personas por la COVID-19, mientras que se confirmaron 812.212 afectados.

Según la OMS, en Europa, con un acumulado de 28 millones de casos y 622.000 muertes, y que registró 273.000 contagios y 6.000 decesos entre viernes y sábado, no se evidencia por ahora un claro repunte con respecto a las semanas anteriores.

Es América la que más preocupa. Se sumaron 440.000 diagnósticos positivos y 7.800 muertes en un mismo día, por lo que el continente acumula en más de un año de pandemia 38 millones de contagios y más de 900.000 fallecidos.

La mayoría de los expertos concluye que las fiestas de diciembre, en las que hubo reuniones de celebración navideña sin respetar el distanciamiento social, el uso de la mascarilla y el lavado de manos, son el origen del aumento de los ingresos hospitalarios, lo que está haciendo que los sistemas sanitarios, especialmente en América Latina, colapsen.

Estados Unidos se mantiene como el país más afectado, con 21 millones de casos, seguido de India (10 millones) y Brasil, que en la pasada jornada notificó una cifra récord de casos diarios (62.000, que dejan más de 8 millones de infectados).