Tamara Falcó se encara con una vecina de su comunidad a tenor de unas cacas de perro: "Está amargada"

La marquesa de Griñón vive una situación muy incómoda con esta mujer

Tamara Falcó en 'El Hormiguero'

Tamara Falcó en 'El Hormiguero' / EUROPA PRESS

Irene Roma

Tamara Falcó por fin se ha mudado con su marido, Íñigo Onieva, al espectacular y exclusivo ático que la hija de Isabel Preysler había comprado con anterioridad en la urbanización Puerta del Hierro. Allí, la pareja estrena su vida de casados y hace planes para alcanzar su sueño: dar la bienvenida a un deseado bebé.

Aunque Tamara Falcó adquirió la vivienda mucho antes de trasladarse allí, todavía no conocía a ningún vecino porque ha empleado todo este tiempo en acometer varias reformas para decorar el domicilio totalmente a su gusto. Ahora, ya viviendo allí, la también colaboradora de El Hormiguero ha descubierto que hay gente "amable y muy discreta" en su urbanización y otra que no lo es tanto. De hecho, ya se ha enfrentado a una de sus nuevas vecinas, tal y como ella misma ha confesado.

El nuevo barrio de Tamara Falcó e Íñigo Onieva

Tamara Falcó está encantada con su lujoso ático, no sólo porque está totalmente personalizado hasta el más mínimo detalle, sino por la zona en la que está enclavado. Y es que la hija de Isabel Preysler vive muy cerca de su madre y envuelta en naturaleza, como ella quería.

Es más: una de las cosas que más valora es "el parque tan bonito que nos han hecho enfrente", admite. "Cuando compré la casa -dice-, la zona no estaba tan arreglada, pero han ido plantando árboles y ha quedado muy bonito".

Las especiales características de su nuevo barrio es otro de los factores que llevan a Tamara Falcó a estar encantada con su nuevo domicilio. No en vano, lo que más le gusta es "estar cerca de la familia y tener un supermercado estupendo, donde nos conocen de toda la vida". Y, por supuesto, también "el Club Puerta de Hierro".

Los vecinos también ayudan a que Tamara Falcó e Íñigo Onieva se sientan tan a gusto en su nuevo barrio. Y es que, según la hija de Isabel Preysler, "son superdiscretos, amables y muy educados". Además, "hay muchos niños" en la zona "y es una gozada porque dan mucha alegría".

Tamara Falcó e Íñigo Onieva, en una imagen de archivo.

Tamara Falcó e Íñigo Onieva, en una imagen de archivo. / L-EMV

Sin embargo, y pese a que todo parece idílico, la marquesa de Griñón ya ha tenido problemas con algunos vecinos, concretamente con una vecina "que está amargada", describe Tamara Falcó.

Se trata de "una señora mayor" con la que ya ha vivido un enfrentamiento cara a cara. "El otro día volvía del parque con las perritas -relata la televisiva hija de Isabel Preysler- y me dijo: 'Estoy hasta las narices de que dejéis las cacas de los perros'.

Tamara Falcó se quedó estupefacta con el comentario y le contestó. "Le dije: 'Oiga, señora, las recojo siempre. Acabo de hacerlo'". Cuando volvió a su apartamento, la marquesa de Griñón se enteró de que la mujer no sólo se había encarado con ella, sino que "también les grita a los niños" porque al parecer "está harta de ellos y de todo", cuenta.

A juicio de la colaboradora de El Hormiguero, la mujer no tiene razón y "es para decirle: 'Oiga, es lo que tiene residir en una comunidad, que hay vecinos y hay que convivir", asegura, aunque al mismo tiempo afirma que, más allá de ese pequeño encontronazo, está satisfecha con el ambiente que envuelve su nuevo barrio y con su vida junto a su marido, Íñigo Onieva.