El pleno del próximo jueves 7 de junio incluirá la aprobación de la cesión a la Xunta de Galicia del edificio de la antigua Fábrica de Tabacos para ejecutar las obras de obras rehabilitación yFábrica de Tabacos reforma de los 14.000 metros cuadrados destinados a usos judiciales y los 3.000 para un destino sin determinar, por el momento.

La actuación supondrá un inversión de 20 millones de euros. “Se ha optado por la cesión sujeta a condición de afectación permanente del edificio a usos judiciales. En el momento en que deje de servir de soporte para estos usos, la propiedad del inmueble debe revertir en el Ayuntamiento. Además, se recoge expresamente que no se entenderá cumplido y consumado el destino aunque se mantenga durante treinta años, sino que tendrá que ser de carácter permanente”, ha explicado esta mañana el portavoz municipal, Julio Flores.El acuerdo del Concello con la Xunta recoge que el edificio dejará de estar afectado “cuando quede libre y sin uso el 50% de su superficie útil, para mayor garantía de cumplimiento del uso para fines judiciales”, señala el portavoz.

El proyecto de rehabilitación de la Fábrica de Tabacos “respetará la identidad histórica del edificio, conservando la fachada y el reloj y permitirá incrementar en un 70% la superficie destinada a dependencias judiciales en nuestra ciudad”, ha defendido Julio Flores. “Hemos logrado encontrar solución a otro problema heredado”, dice al tiempo que lamenta las críticas de la oposición a este proyecto. “Ni el Gobierno de Zapatero aportó la subvención prometida de 5 millones de euros ni el anterior gobierno municipal logró hacer realidad un proyecto que en el 2006 costaba 12,5 millones y ahora, debido a su desidia y al estado de abandono del edificio, costará 20 millones de euros”.

La previsión del Gobierno municipal es la de poder entregar el edificio en junio, un mes antes de la previsión inicial, para que la Xunta pueda licitar las obras en el segundo semestre de este año y lograr que a principios de 2013 se trabaje ya en la rehabilitación del edificio.

Liquidación de la mancomunidad

Otro de los asuntos que se tratarán en el próximo pleno del jueves, día 7 de junio, será la disolución de la mancomunidad tras el trámite de exposición pública en el que no se prestaron alegaciones y tras recibir los informes positivos de la Xunta y Diputación.

La Asamblea de la Mancomunidad aprobó el pasado 12 de marzo, por mayoría y con la única abstención de los ayuntamientos de Culleredo, Bergondo y Betanzos, el acuerdo inicial para su disoluciónMancomunidad . “Se trata de poner fin a una Mancomunidad sin contenido en los últimos 12 años y abrir nuevos caminos”, manifiesta el portavoz municipal, que añade, además, que hay voluntad de llegar a acuerdos que beneficien a los ciudadanos como los relativos al servicio de depuración de aguas. “Hay que dar pasos para prestar servicios de calidad que beneficien a los más de 500.000 habitantes que residen en la ciudad y en el área metropolitana”, ha concluido Julio Flores.