El Madrid encarriló su presencia en las semifinales de la Liga de Campeones tras derrotar al Juventus (0-3) gracias al gol de Marcelo y al doblete que firmó Cristiano Ronaldo, gran protagonista del encuentro con un gol de chilena que puso en pie al estadio turinés, incapaz de no rendirse al talento del portugués.

Su imponente hambre y su fiel despertar en primavera permitieron al Madrid salir más que victorioso del Piamonte. Un 0-3 que manda un mensaje a toda Europa, dejando claro que la corona tiene un color, el blanco, y que para arrebatársela a su dueño habrá que escalar el Everest.

Cristiano ya suma 14 goles en esta Champions -en diez partidos- y sigue siendo el rey cuando llega este tramo de la temporada. El de Madeira apenas tardó en reclamar los focos y dejar su impronta en el verde turinés. Un centro de Isco, el elegido por Zidane para jugarse las castañas, conectó en la bota derecha de CR7, que sorprendió a Buffon.

El gol despertó al cuadro bianconero, que se hizo dueño del partido tan solo diez minutos después. Allegri pidió más picante a los suyos y lo consiguió provocando las mejores ocasiones en botas de Dybala, que se topó con Ramos en un gran disparo, o de Higuaín, que estuvo a punto de batir a Keylor.

El Madrid sentenciaría en la segunda mitad con la chilena de Ronaldo y Marcelo pondría la guinda con el tercero para los blancos ante los italianos.