El entierro ayer en Feáns de Francisco Javier Romero JimmyJimmy, el Riazor Blues fallecido el pasado domingo tras los violentos incidentes en el entorno del estadio Vicente Calderón, tuvo unas consecuencias inesperadas por la asistencia de Augusto César Lendoiro, expresidente durante 25 años del Deportivo.

El presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, destituyó fulminantemente a Lendoiro, nombrado en mayo embajador internacional de la LFPLendoiroembajador internacional de la LFP, tras saber que había acudido al funeral por el radical deportivista. El expresidente del Dépor asistió al servicio fúnebre acompañado por su hijo mayor. Fuentes de la familia de Lendoiro manifestaron a este diario que el expresidente deportivista acudió al sepelio "a título personal", para "dar el pésame a la familia del fallecido, a cuya madre conocía" y para despedir "a una persona que fue socio durante años del Deportivo".

Augusto César Lendoiro mantuvo en sus años de mandato en el Deportivo buenas relaciones con los Riazor Blues, que lo homenajearon con la entrega de una placa en su último partido como presidente blanquiazul placa el pasado mes de enero.

Al sepelio, que tuvo lugar ayer por la tarde en el cementerio de Feánssepelio, asistieron cerca de doscientas personas que acompañaron al féretro en medio de un tumultuoso silencio correspondiendo los asistentes a la petición de la familia, que intentaba celebrar un acto en la intimidad.

El coche que trasladaba el cadáver llegó a Feáns a las 17.13 horas, con la protección de tres furgones de la policía, acompañado de otros tres vehículos fúnebres que portabas las decenas de ramos que velaron el cuerpo de Jimmy durante toda la noche y que fueron depositados al pie de la lápida en la que ya descansa. Entre las coronas destacaba una de flores blancas y azules enviada por Joan Capdevila, exfutbolista deportivista, en la que se podía leer: Jimmy sempre con nos. JimmyJoan Capdevila.

La presencia de Lendoiro, que llegó al cementerio a las 16.50 horas, casi media hora antes que el féretro, y la corona de Capdevila fueron la única representación del Deportivo en el sepelio. El actual consejo de administración decidió mantener al margen de cualquier acto relacionado con la muerte de Jimmy, pues ningún directivo estuvo en el tanatorio como tampoco durante el entierro.

El féretro que transportaba el cuerpo de Jimmy fue cubierto por una bandera de Los Suaves, el grupo de los Riazor Blues al que pertenecía el fallecidoLos SuavesRiazor Bluesfallecido, y transportado a hombros por varios de sus excompañeros. El desfile se inició en la entrada del cementerio y finalizó en el lugar en el que está el nicho, con los familiares siempre al frente acompañados de numerosos amigos y vecinos, hasta una cifra que se acercaba al doble centenar de personas.

En el exterior, en las carretas próximas al campo santo, había cinco furgonetas de la Policía Nacional y un coche de la Policía Local. Dos de las nacionales habían llegado a la zona antes del horario previsto para el entierro -17.00 horas- y las otras tres escoltaron al cortejo fúnebre que partido desde el tanatorio, sito en A Grela. En ningún caso fue necesaria su intervención en ningún momento, más que para controlar el tráfico, ya que el sepelio se desarrolló en silencio y con un tremendo respeto al muerto y a su familia.