Los propietarios del restaurante Manel, en la avenida del Puerto de Sada, iniciaron ayer las labores de demolición de la terraza del establecimiento. Los empresarios cumplen así con el último requerimiento del Gobierno local de Sada (PP, PDSP), que les urgía a iniciar las labores de derribo el lunes 10 y finalizar el miércoles 12 de septiembre.
El alcalde, Ernesto Anido, aprobó un decreto el pasado 24 de agosto en el que advertía a los propietarios que, de no acometer la demolición en ese plazo, podría imponerles multas coercitivas reiterables que oscilarían entre 1.000 y 10.000 euros. El Concello ya impuso el pasado julio una multa de 1.000 euros a los hosteleros por no presentar en plazo el proyecto de demolición visado.
Las obras de derribo ponen fin a un dilatado proceso que arrancó en el año 2008 con la apertura de un expediente de reposición a la legalidad urbanística que fue ratificado por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de A Coruña, que en septiembre de 2011 ordenó la demolición.
Los propietarios mantuvieron ante el juez que habían obtenido licencia en 2004 por silencio administrativo, aunque en 2008 solicitaron nuevamente una que les fue denegada.
