Una señal de prohibido aparcar y un texto Excepto Servicios Religiosos es bastante habitual al lado de cementerios e iglesias. Por eso algunos visitantes se mostraron sorprendidos al ver el artesanal método de reserva de aparcamiento que se utiliza en la parroquia de Crendes en Abegondo: dos rayas blancas pintadas sobre el asfalto del aparcamiento junto al templo, una de ellas algo torcida, y en medio una palabra escrita a pulso con pintura y brocha, "cura".

"Yo llevo tres años aquí y cuando llegué ya existía lo del aparcamiento, supongo que lo hicieron los feligreses en su día, con el anterior párroco. Es un gesto, la gente colabora en la actividad de la iglesia. Con el tiempo se va borrando la pintura y luego la van repintando", explicó ayer el sacerdote que se encarga de la parroquia de Crendes y de otras de Abegondo, Fernando Isorna.

El párroco explicó que al igual que en otros lugares, hace falta un sitio reservado para el coche fúnebre, los familiares, el sacerdote, porque muchas veces los asistentes a los oficios no dejan ni un hueco libre.

"Aquí lo vemos normal, los feligreses que cuidan la iglesia también cuidan de estas cosas, y no sólo está así en Crendes, en muchas parroquias de aquí de Abegondo, como en Santirso, también tienen una plaza para el cura", explicó una vecina, asombrada de que a los visitantes les resultase tan extraño que se escribiese sobre el asfalto para dejar claro qué único profesional puede aparcar en ese lugar.

La parroquia de Crendes es una de las más bonitas del municipio de Abegondo. Con unos 600 habitantes, está situada en una especie de península que se adentra en el embalse de Cecebre.