Es el tesoro vivo de Betanzos, un artista multidisciplinar que además creó un centro de formación pionero en España y al que cada año acuden alumnos de todo el mundo. Ayer el Ayuntamiento brigantino nombró Hijo Predilecto a Jesús Núñez (1927) en un acto emotivo en el salón del real del Consistorio, que luego continuó con el descubrimiento de una placa en el edificio Liceo, donde una de las salas de exposiciones llevará ahora su nombre.

"Es un honor para mí, aunque con ser hijo de Betanzos ya me llega", declaraba ayer Jesús Núñez horas antes del homenaje que recuerda el mérito inestimable de este brigantino que convirtió la casa de la familia en un espectacular centro-museo generador de cultura y que ha logrado lo más importante, que perviva. Aunque desde sus inicios siempre quiso que una Administración pública se hiciese cargo de él para garantizar su futuro. "Estamos en un proceso de estabilización para garantizar su continuidad. No puedo decir nada más por ahora. Yo soy optimista por naturaleza", señalaba.

El título de Hijo Predilecto le llega a Núñez cuando se cumplen treinta años del germen del Centro Internacional de la Estampa Contemporánea (CIEC), con un congreso nacional de grado en 1983 y luego unos exitosos cursos de verano en 1985, pioneros en España, que dieron lugar al centro y en 1997 a la Fundación CIEC, destinada a promocionar y difundir las artes plásticas.

El CIEC, desde su sede en pleno casco histórico en un impresionante edificio de 1932 de González Villar que fue almacén y banco, oferta cursos y talleres y desde 2003 un máster en Obra Gráfica al que acuden extranjeros en su mayoría. Este centro también realiza publicaciones, conferencias y conciertos.

"A los cursos de verano acude el 99% gente de España y al máster el 70% son extranjeros. Vienen personas de todo el mundo. Tuvimos un curso en árabe, vino gente de los Emiratos y de la Universidad de Washington, el mes pasado vino una joven de Nueva Delhi (India), ha venido gente de toda América... En este centro de Betanzos se da formación a personas de todo el mundo", subrayó ayer Jesús Núñez, uno de esos brigantinos singulares que recuerdan que la Ciudad de los Caballeros siempre ha sido prolífica en talento, arte y potente cultura emprendedora.