Siete asociaciones ecologistas, las cofradías de A Coruña, Mera, Pontedeume, Ares y tres empresas que representan los intereses de los bateeiros y bateas del cultivo del mejillón de la ría de Betanzos han presentado alegaciones contra el proyecto del Ministerio de Medio Ambiente de extraer de la ría 261.756 metros cúbicos de arena del fondo del mar para rellenar la playa de Sada.
Todos los recurrentes recalcan que no se oponen a la regeneración del arenal sadense, pero apelan al impacto ecológico y económico de la actuación tal y como ha sido diseñada por Estado en una zona "de inmenso valor medioambiental", de "gran actividad pesquera" y "principal zona de cría y reclutamiento de varias especies".
Los colectivos reclaman en sus alegaciones la suspensión sine die de la fecha de apertura económica del anuncio de licitación de la obra y que se modifique el proyecto o anule definitivamente para evitar el daño ecológico y "el daño irreparable para el sector pesquero de incalculables consecuencias".
EÁmbito "indispensable" para la pesca. Las cofradías apelan a la "alarma social" que ha provocado la obra en el sector y advierten de que la zona de extracción de arena que establece el proyecto del Estado "es muy rica en producción pesquera, sobre todo de las especies de centolla, lenguado, sepia, raya, rodaballo, salmonetes o fanecas", entre otras. Los pescadores inciden en que se trata de un ámbito "indispensable" para su actividad que "da sustento económico y social a todos los pescadores y sus familias". Las cofradías alertan de que el plan "tiraría por tierra la explotación racional y sostenible de los recursos marinos" y "destruiría una zona de inmenso valor medioambiental".
EDuro golpe a la producción anual de mejillón. En una línea similar a los pescadores, tres empresas que representan a la totalidad de los bateeiros y bateas de cultivo de mejillón de la ría Ares-Betanzos advierten en sus alegaciones al duro golpe que el plan, tal y como está planteado, asestará a la producción. Las sociedades Mexilor, Cooculmar y Ostrares argumentan en su escrito que los trabajos de dragado afectarán a la calidad del alimento del mejillón (sestón) al remover los fondos y, consecuentemente, las partículas en suspensión, en su mayoría inorgánicas. Las empresas incorporan a sus alegaciones las conclusiones de varios estudios de campo que demuestran que la calidad del sestón está "íntimamente ligada al crecimiento y desarrollo del mejillón. Los bateeiros incluyen también gráficos que muestran cómo afecta la presencia de material inorgánico a la calidad de este alimento. Según este estudio, remover los fondos en la zona planteada provocaría una mayor presencia de esta materia que afectaría al crecimiento del mejillón. "La producción podría verse seriamente afectada", advierten los empresarios que, al igual que las cofradías, reclama la modificación o "suspensión total" del proyecto.
E"Graves omisiones" en el estudio ambiental. La Sociedade Galega de Historia Natural, Adega, Hábitat, Plataforma na en Defensa da Ría de Sada e Betanzos, Arco Iris, O Rabo do Galo y la Sociedade Galega de Ornitoloxía, reclaman la "suspensión" del proyecto por las "graves deficiencias y omisiones" en el estudio de impacto ambiental. Alertan que supondrá un "elevadísimo coste medioambiental y económico" y denuncian que la actuación está basada en un estudio de impacto ambiental de hace diez años y que "no contemplar el zosteral de la playa de Sada". Los colectivos alertan del daño que la obra ocasionará en plantas acuáticas protegidas como la zostera noltii que tienen gran importancia para la alimentación de aves acuáticas y como refugio y cría de las especies marinas. Los ecologistas critican también que no se hayan hecho análisis de los sedimentos.
