El Gobierno local que lidera Carlos Calvelo sigue sin aprobar el nuevo plan general de Arteixo que actualice las normas subsidiarias de 1995 casi seis años después de hacerse con el poder. Fue una de las promesas estrella del regidor en la campaña de 2011, cuando prometió aprobar este documento antes de 2015. Lo incumplió. Ese mismo año rescindió el contrato a los redactores y desde entonces no ha licitado uno nuevo para elaborarlo. La concejalía de Urbanismo ha promovido hasta 19 planes para modificar las normas subsidiarias de 1995 para reordenar el territorio desde el año 2011.

El Concello ya ha iniciado la tramitación de tres recalificaciones de suelo ante la Xunta este año. Una para construir una piscina en Meicende, otra para legalizar los núcleos rurales situados en el litoral y otra para crear una plaza y un aparcamiento en la avenida del Butano, en Meicende. 2013 fue el año que más desarrollos urbanísticos puso en marcha la concejalía de Urbanismo. En total fueron siete. En 2014 fueron cuatro, en 2016 la cifra fue de cinco y en 2017 ya lleva tres.

Otra de las recalificaciones de terrenos que promovió el Concello fue en el polígono de Sabón, donde tramitó un cambio en las normas subsidiarias de 1995 para permitir los usos terciarios. También ha promovido varios desarrollos en la capital municipal. El alcalde, Carlos Calvelo, siempre ha defendido que el Concello pone en marcha estas modificaciones de las normas de 1995 para conseguir terrenos para "equipamientos públicos". La oposición ha acusado al Ejecutivo municipal varias veces de no estar interesado en elaborar el plan general.

La elaboración del plan general ha provocado más de un intenso debate plenario entre Gobierno local y oposición. En 2014 TeGa, BNG y PSOE abandonaron la sesión por las "mentiras" del concejal de Urbanismo, Alberto Castro, sobre el plan general, según denunció la oposición.

La tramitación del plan general de Arteixo está paralizada desde 2011. Ese año la Xunta emitió una valoración sobre el documento de inicio que había entregado el anterior Ejecutivo, de PSOE y TeGa, a la Consellería de Medio Ambiente. El PP se hizo con el poder y desde entonces no ha habido avances significativos en la redacción de este documento, que es un instrumento básico de ordenación integral del territorio. Define el modelo de municipio y cómo debe ser su crecimiento.

Arteixo optó por rescindir el contrato a los redactores del plan general en 2015 porque la redacción del documento iba "mucho más retrasada" de lo esperado inicialmente. Alberto Castro señaló que se trataba de un documento "sin trabajar" y entregado precipitadamente antes de unas elecciones. Las empresas que redactaban el plan general desde 2007, Arnaiz y Tinsa, denunciaron que en 2011 entregaron el informe previo a la aprobación inicial y que desde ese momento no fue posible la entrega de los siguientes puntos previstos para elaborar el documento.

El concejal de Urbanismo, Alberto Castro, asegura que el Concello ha rescindido el contrato para redactar el plan general. Lo hace dos años después de anunciar que iniciaba la rescisión. En este tiempo ha analizado si pagaba una factura de 70.000 euros a los redactores, Arnaiz y Tinsa. El edil explica que los "técnico dicen que el trabajo no cumple los requisitos".

El siguiente paso que ha dado el Gobierno local es iniciar los trámites para contratar la redacción del plan general. Alberto Castro señala que la concejalía de Urbanismo ya ha elaborado el pliego de cláusulas técnicas y lo ha entregado a Contratación para que lo licite. La previsión que ofrece el edil es que el contrato salga a licitación en marzo o abril.