La Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio ordena someter al procedimiento de evaluación ambiental estratégica la modificación puntual de las normas subsidiarias que tramita el Concello de Arteixo en unos terrenos de Meicende atravesados por la Avenida do Butano. El Ejecutivo municipal prevé en este ámbito una plaza polivalente, una estación intercambiadora del bus, un aparcamiento disuasorio, un equipamiento asistencial y cerca de cien viviendas.
La Dirección Xeral de Emerxencias advierte de que este sector (UA-23) de 12.342 metros cuadrados se encuentra en la zona de influencia del Plan de Emerxencia Exterior de A Grela Bens por su proximidad a la refinería. "Las previsiones para la zona suponen un aumento del riesgo por incremento de población expuesta, así como la necesidad de asignar recursos operativos y de gestión de emergencia superiores a los previamente requeridos", advierte.
En su resolución, Emerxencias sostiene que este desarrollo constituye un aumento de los riesgos en el entorno de la refinería y ve necesario "un estudio riguroso para determinar la aceptabilidad del riesgo social en la zona y, de ser el caso, adoptar las medidas técnicas adicionales de prevención y protección".
El Concello justificó este desarrollo en la procedencia de cumplir una sentencia de 1997 que obligaba a calificar los terrenos de urbanos. Precisamente, fue la cercanía de la refinería la que suscitó el recurso. Un particular alegó contra la aprobación definitiva de las normas subsidiarias y la clasificación de sus terrenos como no urbanizables. La comisión provincial defendía entonces que el núcleo de Meicende no podía seguir creciendo hacia la refinería por seguridad y que los terrenos debían ser clasificados como no urbanizables de especial protección de infraestructuras. El Tribunal Superior dio la razón al recurrente porque sus terrenos disponían de todos los servicios.
El Ayuntamiento apela ahora a esta sentencia para defender la procedencia de desarrollar un sector que, tal y como figura en las normas subsidiarias, carece de edificabilidad y debe ser destinado en su totalidad a equipamientos y zonas verdes y cuyo aprovechamiento está vinculado a un sector de suelo apto para urbanizar (SAUI-2) al que la nueva ley de suelo obliga a aplicar el régimen de suelo rústico.
El equipo redactor de la modificación urbanística, Monteoliva Arquitectura, plantea varias alternativas y se decanta por una opción que sitúa al sur de la Rúa do Butano la plaza pública y la estación intercambiadora y materializa el aprovechamiento urbanístico al norte del ámbito, más próximo a la refinería.
El Concello prevé otorgar a los propietarios el máximo aprovechamiento urbanístico para "equilibrar los beneficios y cargas de la ordenación", que se desarrollaría por el sistema de compensación. El aprovechamiento residencial que establece es de 10.788 metros cuadrados, equivalente a unas cien viviendas distribuidas en edificios de cuatro alturas (B+3).
Los organismos de Ordenación do Territorio instan al Concello a justificar la reducción de sistemas generales al aumentar la capacidad residencial, aunque ven apropiada la distribución para mejorar la calidad visual del ámbito al ocultar traseras y medianeras. La Xunta ve también positiva la estación intercambiadora y el aparcamiento disuasorio previsto.
