La Diputación de A Coruña llevará a pleno este viernes la aprobación del proyecto para construir una senda peatonal entre los núcleos de Rorís y Anzobre, en la parroquia de Armentón. El Gobierno provincial destinará alrededor de 480.000 euros a la ejecución de la obra y 110.000 a la expropiación. El proyecto incluirá la ampliación de la carretera. El ancho aumentará entre 1,50 y 2,55 metros. El vial, en la actualidad, mide 6,50 metros.

Los trabajos requerirán la realización de un desbroce y un desmonte previo en la zona de ocupación de la futura senda. La empresa que ejecute la obra también deberá demoler y reponer los cierres afectados, además de mover los postes de servicios. La senda peatonal tendrá un ancho de 1,80 metros en los tramos en los que atraviese núcleos rurales -Rorís, A Crucella y Anzobre-, según indica el proyecto de obra. La acera estará formada por adoquín prefabricado de hormigón de color gris y negro. La senda también medirá 1,80 metros de ancho en los tramos de suelo rústico, pero en este caso se realizará en pavimento de aglomerado asfáltico.

La Diputación deberá ejecutar tres nuevos muros de contención de granito que sostengan las tierras colindantes. El proyecto de obra del Gobierno provincial se basa en uno del Concello.

En la parroquia vecina de Monteagudo el Ejecutivo municipal ya completó la expropiación de los terrenos necesarios para construir una acera en A Cachada.

El Gobierno local dio luz verde a la expropiación de unos 4.000 metros cuadrados de terrenos, básicamente frentes de fincas, la gran mayoría suelo de núcleo rural y en algún caso suelo rústico. Además de esta expropiación de terreno el Ayuntamiento también adquirirá unos 191 metros cuadrados de bienes, fundamentalmente muros, cierres de fincas, postes, bloques e incluso un buzón de correos, además de setos y sobre todo mucho hormigón.

A Cachada es un núcleo rural que está ubicado entre Arteixo y A Laracha. En la zona larachesa ya disfrutan de acera desde el año 2008 y en el lado arteixán no cuentan con ella a pesar de que los vecinos la reclaman desde hace años y el Concello la había prometido en varias ocasiones. La actuación en total costará unos 600.000 euros, según adelantó el Gobierno local en su día.