SI NO LO LEO NO LO CREO

Un teléfono caído en un contenedor moviliza a los bomberos

Antón Peruleiro

El parte de incidencias de los Bomberos de A Coruña tiene, en ocasiones, intervenciones poco convencionales, como rescatar a una gaviota atrapada en un patio, socorrer a una persona que se ha atornillado un dedo a un mueble o liberar la cabeza de un niño que se ha quedado enganchado a un columpio. A las 15.52 horas de ayer, los bomberos recibieron una alerta para ir a la calle San Nicolás, el motivo no era una olla olvidada al fuego ni una cornisa que amenazaba con caerse, ni siquiera, un misterioso olor a gas, sino que a un hombre se le había caído el teléfono móvil a un contenedor soterrado y no sabía cómo recuperarlo. En el parque de Agrela tenían la solución, utilizaron “un poco de maña” y también un aparato con una cuerda que les permitió acceder al dispositivo brevemente extraviado, subirlo a la superficie y devolvérselo a su propietario.