El plan director de la Torre de Hércules cumple diez años con la reforma del entorno todavía pendiente

El documento, elaborado por orden de la Unesco, proponía la creación de una rampa de acceso al monumento y su musealización | El traslado del aparcamiento y la humanización de la zona, otros deberes sin completar

Ilustraciones de los proyectos incluidos en el plan director y del centro de interpretación bajo la rampa de acceso.

Ilustraciones de los proyectos incluidos en el plan director y del centro de interpretación bajo la rampa de acceso. / Ana Carro

El plan director de la Torre de Hércules, una de las condiciones impuestas por los técnicos de la Unesco para que el faro fuese declarado Patrimonio de la Humanidad, cumple diez años. Pero muchas de las tareas que incluía este documento siguen pendientes de ejecución, con la reforma del entorno todavía sin completar.

La redacción del Plan Especial de Protección, el traslado del edificio del frontón, la reorganización de accesos al recinto y la humanización del entorno, con la unificación del mobiliario, así como la musealización del faro figuraban como asuntos pendientes que, una década después, no se han realizado.

El plan director de la Torre cumple diez años con la reforma del entorno todavía pendiente

El plan director de la Torre cumple diez años con la reforma del entorno todavía pendiente / Ana Carro

El entorno. Para reorganizar el espacio y proteger el entorno, la Unesco exigió la elaboración del Plan Especial de la Torre, cuya asistencia técnica para su redacción se adjudicó el pasado mes de enero, 14 años después de que el faro fuese declarado Patrimonio de la Humanidad, aunque tenía que estar completado en 2014. Sobre la zona en la que se encuentra el monumento, el plan director apostaba por la “unidad” pues en el parque existe “una variedad excesiva de elementos y, cada uno de ellos, diferentes modelos”, por lo que proponía que la iluminación y el pavimento fuesen iguales, algo que nunca se ha hecho. La idea era eliminar los adoquines y sustituirlos por losetas prefabricadas que permitiesen crecer la hierba, para “recuperar el espíritu de la imagen original”, cuando todo era campo. También se aconsejaba reducir volúmenes y trasladar el edificio del frontón, que sigue presente en los campos de A Torre, donde recientemente se anunció la instalación de una cafetería, y rediseñar las instalaciones deportivas para integrarlas en el entorno, pero continúan separadas por vallas y arbustos que habría que humanizar e igualar con los de los campos de golf. Se incluía la necesidad de retirar la vía electrificada del tranvía, que ya se ha iniciado, pero aún quedan postes, y la plantación de árboles.

El plan director de la Torre cumple diez años con la reforma del entorno todavía pendiente

El plan director de la Torre cumple diez años con la reforma del entorno todavía pendiente / Ana Carro

Accesos. El punto de acceso más utilizado a la Torre es la zona de aparcamiento que hay frente al monumento y que, según el plan director, “bloquea la visión” del faro, por lo que habría que trasladar este espacio dedicado a los coches y en el que ahora también estacionan caravanas —se propone hacer un parking en la zona que quedaría libre si se eliminan los talleres del Agra de San Amaro en los que hubo fuego hace unos días—. Si se retiran los vehículos de esta zona, se podría hacer una plaza de acceso al faro, como si fuese una puerta, y así “limpiar el entorno inmediato de la Torre de elementos que distraigan de la contemplación del monumento”. Además se aconseja instaurar un sistema de control del aparcamiento “para evitar usos indebidos”. En la nueva plaza de acceso se podrían instalar aseos, cafetería, tiendas —se contempla la utilización comercial de la imagen del faro— y kioskos, así como una pequeña ventana que ofreciese una visión limpia de la Torre de Hércules desde la distancia.

Museo. El plan director contempla, por orden de la Unesco, la creación de un centro de interpretación de la Torre. Actualmente hay una pequeña caseta junto al parking que trata de desempeñar este papel, pero es “una solución provisional”. En un principio se habló de abrir el museo en la antigua cárcel, pero se descartó por el estado ruinoso del inmueble. El plan director propone abrir una sala dedicada al faro en el Museo Arqueológico del Castillo de San Antón e instalar una rampa de acceso al monumento con áreas dedicadas al origen, construcción, evolución y uso del faro. Se podría convocar un concurso de ideas para la construcción de esta estructura. Esta novedad contribuiría “a la implementación de la visita, mitigando el esfuerzo y difícil accesibilidad del recorrido actual, así como las inclemencias del tiempo”, pues tendría cubierta. El plan director recupera también un espacio que pertenece al parque de la Torre: las galerías excavadas por los militares en Punta Herminia, con las que se “podría obtener una visión única” del faro. Aquí se plantea la creación de una sala dedicada a los naufragios y la puesta en marcha de las Rutas del Golfo Ártabro. El documento elaborado hace diez años también recuerda la importancia de hacer “visitas guiadas por personas o personajes de la Torre, como pecadores, marineros, fareros o escritores” para hacerlo todavía más atractivo.