La afiliación de extranjeros a la Seguridad Social en A Coruña duplica la de hace ocho años

Las altas rozan las 7.000 en junio, frente a las 3.200 del nivel más bajo en 2015

Sindicatos atribuyen el aumento de la mano de obra extranjera a su incorporación a hostelería y comercio, sectores que “rechaza” la población nacional

Una empleada de un local de hostelería de la ciudad en la zona de terrazas. |   // CARLOS PARDELLAS

Una empleada de un local de hostelería de la ciudad en la zona de terrazas. | // CARLOS PARDELLAS / R. D. Rodríguez

La Seguridad Social registró hace dos meses, en junio, un récord de afiliados, más de 20,8 millones de trabajadores, unos números que reflejan el dinamismo del mercado laboral en el país en lo que va de año. En A Coruña, la evolución de los datos de enero a junio muestra también cifras de récord, puesto que desde que existen registros nunca se habían alcanzado los casi 92.000 afiliados que aparecen en el último balance del Instituto Galego de Estatística (IGE). De esta cantidad, casi 85.000 —también el número más alto de los últimos doce años— son población de nacionalidad española, y los otros 6.977 son extranjeros, una cima estadística en el municipio coruñés que equivale a más del doble de afiliados de otra nacionalidad respecto al momento en que menos extranjeros estuvieron registrados en la Seguridad Social, en marzo de 2015, hace ocho años, con 3.189 afiliaciones.

“No es una evolución brusca de datos. El aumento es progresivo, al ritmo de la recuperación de la anterior crisis económica y de la actualización de la situación de los trabajadores para poder recibir las ayudas derivadas de la pandemia y el acogimiento de las empresas a los expedientes de regulación”, reflexiona Demetrio Vázquez, miembro de la comisión ejecutiva comarcal de Comisiones Obreras (CCOO).

Añade este veterano sindicalista que la reforma laboral ha propiciado la eliminación de la temporalidad contractual y la incorporación de altas a la Seguridad Social “con carácter indefinido”, y resalta que al mercado laboral se han sumado trabajadores con “mayor cualificación”, así como mano de obra extranjera que acepta entrar en sectores “más reticentes” para empleados nacionales porque presentan peores condiciones salariales.

Otro sindicato, la CIG, relaciona el incremento notable de afiliaciones extranjeras —cerca de las 7.000 hasta junio—con la evolución demográfica. “La población gallega se estanca y la producción en Galicia se suple con población de otros países. Tenemos una estructura de empleo todavía muy precaria y en lugar de mejorar las condiciones económicas se produce un desvío de carga de trabajo hacia una población más dispuesta a aceptar condiciones laborales más precarias”, opina Óscar Calvo, secretario de organización de la CIG en A Coruña.

Los dos sindicatos apuntan a la hostelería y al comercio como sectores en los que “tradicionalmente” más crece la afiliación de extranjeros en una ciudad con predominio de servicios como A Coruña (y en Galicia en general), sin olvidar el segmento sanitario de los cuidados a personas dependientes y la construcción. “Somos un país de emigrantes. Cuando uno emigra está dispuesto a trabajar en condiciones relativamente mejores a las del lugar del que viene, pero que son consideradas precarias para el conjunto de la población autóctona, que las rechaza. Si aumenta la mano de obra extranjera y no baja el paro, es obvio que ese incremento de puestos de trabajo se da en aquellos campos en los que los nacionales no quieren trabajar, fundamentalmente porque las condiciones son duras o se trabaja a media jornada”, reitera Óscar Calvo (CIG).

Vázquez (CCOO) apunta además que población procedente de países como Brasil, Venezuela y Colombia se incorpora a distintas ramas sanitarias debido a la “escasez de personal en la sanidad pública y la privada”. “Muchos sanitarios se han marchado del país por las mejores condiciones que encuentran para trabajar en otros países y en España hay dificultad para cubrir puestos”, señala.

La patronal coruñesa advierte en cambio un aumento de empleo “transversal” en la ciudad a tenor de los datos reflejados por el IGE en los primeros seis meses, y celebra el fortalecimiento del mercado laboral con la incorporación de trabajadores de otros países, según expone el presidente de la Confederación de Empresarios de La Coruña (CEC), Antonio Fontenla.

“Creemos que es muy positivo el buen comportamiento del mercado laboral en A Coruña. Los datos de afiliación a la Seguridad Social muestran que el mercado de trabajo ha conseguido recuperarse totalmente y superar los datos de afiliación previos a la pandemia. Los datos registran un crecimiento del empleo transversal a la mayoría de sectores, con la excepción de aquellos con menor actividad en el período estival, pero que hay que atribuir de manera muy especial al incremento de la afiliación en hostelería y comercio. En cuanto a la afiliación de trabajadores de otras nacionalidades, valoramos especialmente la contribución de estos trabajadores a la actividad en el tejido económico gallego, con un crecimiento continuo de las afiliaciones en los últimos años. Estas personas están suponiendo un muy necesario refuerzo para las plantillas en muchos sectores, sobre todo en algunos con mayor dificultad para la contratación, como la hostelería, la construcción o la pesca, sectores de referencia en nuestra economía”, expone Antonio Fontenla.

Como contrapunto a quien atribuye a la reforma laboral el fin de la temporalidad y, por tanto, mejores condiciones laborales, la CIG matiza que los cambios impulsados por el Gobierno estatal son, en su opinión, “el maquillaje de unos datos que parecen mejores de lo que en realidad son”. “En la práctica, los contratos indefinidos no son más que temporales que van y vienen, y sobre todo en época estival, con sectores que demandan más mano de obra y cuando los datos suelen ser mejores, pero que no los son para la clase obrera gallega en su conjunto”, considera Calvo.

Suscríbete para seguir leyendo