La Xunta convoca a los propietarios de los terrenos expropiados para construir los accesos del Chuac

La Xunta convoca a los titulares de los terrenos necesarios para ejecutar los accesos al nuevo Chuac para el levantamiento de actas previas a la ocupación. Así lo refleja el Boletín Oficial de la Provincia, que cita a los expropiados para el levantamiento de actas el 12 de septiembre en Nuevos Ministerios a las 10.30 horas. La formalización de actas, por su parte, tendrá lugar el 15 de noviembre. El contrato del concurso del proyecto y la consiguiente obra se encuentran ahora mismo en proceso de licitación. Para construir los nuevos accesos, la Xunta procederá a la expropiación de 14 parcelas —inicialmente eran 18— para la ejecución de los accesos al Chuac.

El Gobierno autonómico detalló entonces que el diseño de los nuevos enlaces evita la afectación a viviendas y reduce la superficie de expropiación a 18.131 metros cuadrados, de los que 14.735 metros cuadrados serán de ocupación definitiva, y los restantes 3.396 de ocupación temporal. En la intervención se prevé la construcción de un anillo de circulación alrededor del hospital y mejorar la funcionalidad de los accesos al complejo hospitalario y adaptarlos al nuevo hospital, por lo que el proyecto permitirá definir las actuaciones para la construcción de un nuevo enlace sobre un tramo de la AC-12, cuya titularidad ha asumido la Xunta. La conexión con la AC-12 se realizará, informan, a través de un enlace tipo trompeta y una glorieta de 41 metros de diámetro.

El presupuesto para la redacción del proyecto y la ejecución de las obras es de 24,2 millones de euros, a los que hay que sumar el coste de los trabajos de control y vigilancia de las obras y las expropiaciones. El periodo del que dispondrá la empresa adjudicataria es de 24 meses. Los vecinos del barrio han manifestado su preocupación por el impacto que los trastornos del tráfico derivados de la ejecución de las obras pueda tener en el barrio mientras duren los trabajos. Aseguran que entre los terrenos expropiados temporalmente para la construcción de los viales se encuentran parcelas del propio parque de Eirís, como el estanque de patos, el espacio destinado a perros o el reservado a las huertas urbanas, que temen quede “incomunicado” al pasar el vial “por encima”.