El barco a Oleiros se queda anclado

La apuesta por una línea de transporte marítimo en barco que una A Coruña con Oleiros sigue amarrada en el puerto. Cuando se cumple un año del inicio de las conversaciones entre los alcaldes de los concellos implicados, ninguna de las partes ha mostrado recientemente avances sobre esta propuesta, que busca seguir el modelo del barco que une Vigo con O Morrazo. Una línea que este verano batió récords al superar la barrera de los 400.000 viajeros.

Fue a inicios de septiembre del pasado año cuando la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, y su homólogo oleirense, Ángel García Seoane, confirmaban la existencia de un acuerdo para analizar la posibilidad de poner en marcha un servicio de transporte marítimo entre las dos ciudades. Un plan que atrajo a A Coruña y al concello vecino, recogido en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de Oleiros y secundado desde María Pita, con el fin de fomentar una movilidad más sostenible a través de un transporte colectivo que reduzca el número de vehículos en carretera y disminuya así la contaminación.

Tras las declaraciones y reuniones que tuvieron lugar entre ambas partes el pasado año, preguntados sobre los posibles avances en las gestiones necesarias para la puesta en marcha del servicio marítimo, los gobiernos de los dos concellos implicados no respondieron a este periódico. Atrás quedó el deseo de los alcaldes de que los barcos pudiesen empezar a prestar servicio este verano.

“Sería como la lancha que une Vigo con Cangas”, afirmaba hace un año García Seoane, en referencia a un modelo de éxito que este verano alcanzó cifras de récord. Según los datos de las navieras que gestionan la conexión con Cangas y Moaña, las dos rutas sumaron entre los meses de junio y agosto un total de 407.824 pasajeros; una cifra inédita en los últimos años que supone un crecimiento del 16% respecto al verano anterior.

La conexión marítima entre A Coruña y Oleiros aún no muestra avances a pesar de que los dos municipios aseguraron hace un año estar trabajando intensamente en esta conexión, que ya se realizaba hace años —funcionó hasta finales de los años 70— y que varios políticos locales, como Francisco Vázquez, trataron de recuperar anteriormente con promesas que quedaron en papel mojado.

La propia Xunta vio con buenos ojos esta misma iniciativa ya en 2010, cuando el entonces presidente de Portos de Galicia, José Manuel Álvarez-Campana, planteó poner en marcha una ruta marítima que enlazase los muelles de A Coruña, Santa Cruz, Mera y que incluía también el puerto de Sada.

Las rutas por la ría pinchan

Aunque este verano los coruñeses y turistas no pudieron disponer de esa deseada conexión marítima con Oleiros, sí que tuvieron opción de subirse al Rías Altas 2, la embarcación que cada verano realiza rutas de una hora por la ría que baña la ciudad de A Coruña y la costa oleirense y que este domingo realizará sus últimas salidas hasta el próximo verano.

“Este verano ha funcionado muy mal, no hubo casi gente”, asegura Francisco Fernández Cabanas, patrón del barco, que ya ha perdido la cuenta de los años que lleva en marcha esta ruta. A pesar del auge del turismo en A Coruña y las 150 plazas con las que cuenta la embarcación, asegura que este verano “nunca han llegado a cubrirse”. “Hay mucho turismo, pero son turistas de tierra, no de mar”, sentencia el patrón, que considera que el mismo “fracaso” se ha repetido en los cruceros que realiza su empresa en la Ría de Ferrol.

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