Una marea solidaria sortea obstáculos por la inclusión en A Coruña

A la inclusión no hay obstáculo que se le resista si la sociedad pone de su parte, porque la integración es cosa de todos. Unas 15.00 personas dejaron claro ese apoyo este sábado en una histórica carrera Enki que batió todos los récords de participación en su décima edición. Bajo el lema 10 años corriendo por un mundo inclusivo, son sólo el comienzo, un pelotón solidario recorrió un circuito lleno de obstáculos desde el muelle de Calvo Sotelo hasta la zona de La Marina para recordar que el deporte debe ser un derecho para todas las personas.

Hubo superhéroes, piratas, princesas, personajes de películas de animación y hasta se pudo encontrar a Wally en medio de una marea solidaria llena de color que sorteó todo tipo de obstáculos para mostrar su apoyo a la carrera organizada por la Fundación Enki en colaboración con el Concello.

“Es un evento al que venimos todos los años, por la causa y por la diversión, que son una muy buena combinación”, explicaba Ángeles, madre de una familia que entraba unida a la línea de meta al ritmo de un charanga. Porque además de solidaridad, en la carrera Enki también hubo música y diversión.

Los presentes celebraron la tregua que dio la lluvia desde el inicio de la carrera, que dio el pistoletazo de salida a la 16.00 horas y se prolongó durante tres horas. Muchas de las personas iban preparadas “para lo peor”, con chubasqueros y botas de lluvia que aunque no necesitaron por la ausencia de precipitaciones, sí agradecieron en el momento en que tuvieron que pasar por la zona de espuma o bajo el chorro de agua que arrojaban los bomberos desde su camión en mitad del recorrido. Tampoco faltó una zona de zombies, donde un grupo de muertos vivientes asustaba a los corredores para recordarles que Halloween está a la vuelta de la esquina.

Entre los participantes de la carrera se encontraban entidades sociales que nunca faltan a la cita, que recibieron sendos premios por parte de la organización. Fegerec se llevó el galardón a más participantes menores de 18 años, con 43, mientras que Aspace Coruña se hizo con el reconocimiento al disfraz más original, con un grupo ataviado de casillas del Monopoly. El equipo más numeroso lo formó Fegerec, con 254 personas de la entidad inscritas en la carrera, mientras que Aspronaga se hizo con la plata (80 inscritos) y Down Coruña con el cobre (64).

Pero en realidad todos los participantes resultaron ganadores, al hacer de la carrera Enki un verdadero emblema por la inclusión.