La Xunta propondrá hoy levantar la alerta por sequía en la comarca de A Coruña

La persistencia de las precipitaciones en la comarca coruñesa y la consolidación del volumen de agua embalsada en Cecebre llevarán hoy a la Xunta a proponer en la reunión de la Oficina Técnica de la Sequía el levantamiento de la alerta por sequía prolongada que fue declarada a principios de agosto. La cuenca que abastece a los municipios del entorno de A Coruña tiene también activada una prealerta por sequía desde finales de julio sobre la que ayer no había decisión acerca de si finalmente será retirada también hoy.

El pasado lunes, el porcentaje de ocupación del embalse coruñés era del 63,51%, ligeramente superior al 62,21% alcanzado siete días antes. Pero es que al rebasarse el 62,3% en las jornadas precedentes, Emalcsa se ha visto obligada a reducir el nivel del agua embalsada, ya que ese nivel es el establecido por la Xunta como cuota de resguardo de Cecebre entre noviembre y abril. Una vez superado ese porcentaje, los responsables del embalse deben rebajar el volumen de ocupación para evitar que haya desbordamientos en caso de que se produzcan lluvias torrenciales.

A pesar de esa apertura de las compuertas de Cecebre, la ocupación creció 1,3 puntos la última semana, lo que revela la intensidad de las precipitaciones caídas durante los últimos días.

Cuando la Xunta decretó la prealerta por sequía, el embalse se encontraba al 69% de su capacidad, pero llevaba dos meses de descenso de su ocupación y, al tratarse de finales de julio, la perspectiva era que las lluvias continuadas tardarían en llegar. Los datos de principios de agosto, en los que el volumen se redujo al 62,1%, corroboraron esa predicción y motivaron el aumento del aviso al nivel de la alerta, en el que se ordena a los ayuntamientos que adopten medidas para reducir el consumo de agua.

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El Gobierno local coruñés decidió en ese momento disminuir el número de los baldeos que se realizan en las calles y el uso del agua empleada en la limpieza de los edificios municipales, además del riego de las zonas verdes y el llenado de las piscinas. El retraso en la llegada de las lluvias del otoño y unas semanas de intenso calor que favorecieron la evaporación en Cecebre llevaron a que el 16 de octubre la ocupación bajara del 42%.

El tren de borrascas lleva a los embalses de la costa a niveles máximos, por encima del 80%

Fue en esa misma semana cuando finalmente empezaron las precipitaciones, por lo que el 23 de octubre el nivel de agua ya había subido a casi el 50%. Los responsables autonómicos defendieron entonces que el área coruñesa siguiera en situación de alerta a la espera de ver si las lluvias eran persistentes. En la actualidad son ya cuatro semanas seguidas de chubascos, cuando aún falta más de un mes para el inicio del invierno, lo que hace prever que, a la vista del nivel de Cecebre, no habrá problemas para el abastecimiento de agua en los próximos meses.

Pero serán los integrantes de la Oficina Técnica de la Sequía quienes deberán decidir cuando se levantan todas las medidas preventivas establecidas el pasado verano ante el descenso del agua embalsada en la presa coruñesa.

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