El Puerto apuesta por los planes energéticos en Langosteira y los cruceros para crecer en 2024

El Puerto hace balance. Acaba un año “bueno” y está a punto de comenzar otro ilusionante, con la definición de importantes proyectos en el horizonte. El presidente portuario, Martín Fernández Prado, apunta a los proyectos energéticos enmarcados en la estrategia Green Port, como los relacionados con hidrógeno verde y parques eólicos offshore en punta Langosteira, y a los cruceros como factores de crecimiento del Puerto en 2024. Las expectativas en estos ámbitos se centran en las alianzas con las grandes empresas energéticas de Europa, con las que se firmarán acuerdos globales en los próximos meses para su posible implantación en el puerto exterior, y en la previsión de 160 escalas de cruceros y 400.000 pasajeros, un 23% que este 2023 ya de récord (130 atraques y más de 320.000 visitantes).

Fernández Prado avanzó también que la definición de la fachada marítima de la ciudad, con la ordenación de usos de los muelles liberados de actividad portuaria, es uno de los asuntos que el Puerto abordará en los próximos meses. El presidente evitó dar detalles sobre las reuniones entre la entidad, el Concello y la Xunta, que ya se han reanudado tras quedar interrumpidas a finales de 2021 y tras la negativa municipal a pagar para adquirir los muelles pese a haber expresado antes su disposición a hacerlo. Señaló que el acuerdo que espera alcanzar con las administraciones recoja “el mantenimiento de la titularidad pública del suelo y la generación de financiación para hacer frente a la deuda asumida por el Puerto” para construir la dársena de Langosteira.

Otro asunto que se abordará en 2024 es la construcción del parque eólico experimental en Langosteira que lidera la Xunta en colaboración con la Autoridad Portuaria y Redeia y cuenta con financiación europea de 20 millones de euros. Fernández Prado se mostró optimista sobre el inicio de la tramitación de esta plataforma que analizará los efectos de la eólica marina, sobre el medio marino y la biodiversidad, y también respecto a que obtenga la autorización definitiva pese a que la primera ubicación prevista, a 11 kilómetros de la costa del puerto exterior, recibió un informe desfavorable.

En el capítulo dedicado al año que acaba, Fernández Prado destacó, además del récord de cruceristas, la consolidación de los tráficos de mercancías (unos 14 millones de toneladas) pese a un “ligero descenso” motivado por el menor movimiento de carbón rumbo al norte de Europa. En pesca, las cifras registradas apuntan a un cierre de año con un volumen de descargas similar a 2022, alrededor de 28.000 toneladas, si bien el Puerto mantiene su preocupación por los problemas que afronta el sector, principalmente las cuotas europeas, el encarecimiento de los costes y el menor consumo de pescado en la población.

El presidente de la Autoridad Portuaria calificó como un “hito” la puesta en marcha de la terminal petrolera de Repsol, que ha superado los 20 millones de toneladas de mercancía desde su puesta en servicio en marzo pasado, y destacó el avance de las obras de la conexión ferroviaria a Langosteira, cuyos trabajos se prevén acabar en 2026.

También se refirió Fernández Prado, a preguntas de la prensa, al interés de la compañía danesa Maersk por construir una planta de metanol verde en el puerto exterior, aunque la empresa siempre apostó por que su proyecto para descarbonizar su flota en España empezaría por Huelva y en una segunda fase podría continuar en A Coruña. El principal problema, explicó el presidente, es que para la producción Maersk necesitan dióxido de carbono biogénico: “Hay muy poco en España. Nosotros estamos trabajando con las cinco o seis empresas que lo tienen en Galicia, que en general lo utilizan ellos para sus procesos”.

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