Empezó en India. De allí se fue a Filipinas, después a Indonesia y ahora cierra su gira asiática en Vietnam. Cuando a Carlos Martínez le surgió la posibilidad de ir a jugar la liga profesional de 3x3 de la India, pensaba que iba a estar fuera de casa un mes. Y entonces fue enganchando una oportunidad tras otra para completar una gira de casi tres por Asia. Ahora le toca volver a España porque, además de que empieza a echar de menos la tortilla de patata, arranca la temporada y tiene compromisos con su equipo, el Onil. Dice que salió con una maleta y regresa con dos llenas de experiencias deportivas, que le han llevado a ser el número uno del ranking español —y José Bláquez, que le acompañó en la aventura, el dos— de esta modalidad que se estrenó en los pasados Juegos de Tokio en el calendario olímpico, y sobre todo, de experiencias vitales en un continente y una cultura totalmente diferentes.
“Más allá de los premios, de los partidos, de los torneos... me quedo con las experiencias, los amigos, los contactos y los compañeros. Me ha abierto muchas puertas. Si quisiera alargar mi estancia podría haber estado mucho más, pero hay que volver”, dice el jugador coruñés, ex entre otros del Baskonia, con el que llegó a debutar en la ACB y en la Euroliga, y del Leyma. “A nivel deportivo ha ido bien. En España de octubre a abril es pretemporada, sin mucha actividad. Así que me encontré bien de forma y en todos los sitios por los que pasé subí al podio”, explica tras ganar en Indonesia, ser segundo y MVP en Vietnam y tercero en India y Filipinas. “El 3x3 es un deporte que encanta allí y por eso era una gran oportunidad”, añade.
En cuanto al nivel varía según los países. “En Filipinas, por ejemplo, el baloncesto es casi una religión. Hay muchísima cultura. Pero aunque tienen un físico más parecido al europeo, juegan más parecido a los americanos”, analiza. “En Vietnam todo los equipos tenían al menos dos americanos en sus filas y en India la liga es formato burbuja, es la propia liga la que ficha a los jugadores, la mayoría locales y algunos extranjeros”, continúa. “En mi caso, en India buscaban jugadores internacionales para complementar sus equipos y a nosotros nos pareció una oportunidad para darnos a conocer. Después de dos meses y medio estoy muy contento y agradecido por todo lo vivido” dice y resume en una palabra su estad: “Feliz”.
El siguiente reto es con el Onil. “Nuestro objetivo es seguir con la dinámica del año pasado, intentar sacar el máximo de puntos para meternos en la rueda del circuito pro”, indica. El 3x3 en un deporte en crecimiento, más desde los pasados JJOO. “Cuando empezamos ya pensábamos que los Juegos lo iban a cambiar todo. Se nota que cada vez hay más invitaciones, más torneos, más jugadores. Aunque es cierto que a nivel federativo nos falta dar un pequeño empujón porque estamos en el número 10 mundial”, opina el coruñés, de 26 años que también cree que hay que superar ciertos prejuicios: “No es que sea otro baloncesto. Es que es otro deporte. Es probable que un gran jugador de 5x5 llegue al 3x3 y tenga cero posibilidades de ganar”.
3x3 en A Coruña
El 4 de junio, el Parrote será el escenario de la primera prueba clasificatoria del circuito de 3x3 de la Federación Gallega de Baloncesto. La competición está limitada a 24 equipos, que pueden ser mixtos, masculinos y femeninos, formados por un máximo de seis jugadores y un mínimo de cuatro. A la cita coruñesa le seguirá otra en Ourense el 11 de junio y los 16 mejores del ranking se clasificarán para la final de Santiago (25 de junio). Los campeones de cada serie obtendrán un premio de 500 euros y el de la final, de 2.000. La inscripción está abierta en www.3x3fgb.gal hasta el 30 de mayo por 40 euros por persona.
