Carlos Arévalo es campeón del mundo. El de Betanzos y sus compañeros del K4 metros, Saúl Craviotto, Marcus Cooper y el también gallego Rodrigo Germade, ganaron la final del Campeonato del Mundo que se está disputando en Halifax (Canadá). El barco español firmó un tiempo de 1.20.83, casi medio segundo más rápido que Alemania (1.21.27) y Ucrania (1.21.38).

El coruñés y el resto del equipo nacional se tomó la revancha con los teutones, que les habían relegado a la plata en el Mundial de 2019 y en los Juegos Olímpicos de Tokio del verano pasado. Este año los españoles habían sido ya más fuertes en la Copa del Mundo de Racice y ahora volvieron a ratificar su superioridad, con la que empiezan a escribir el camino hacia París 2024. Alemania no perdía en un Mundial desde 2015.

El domingo a la misma hora (16.19 horas) Arévalo tendrá una nueva opción de subirse al podio ya que disputa la final del K1 200 metros. No era su objetivo principal pero ya en Tokio había fue quinto y puede dar un nuevo salto de calidad. Fue el tercero mejor de las eliminatorias, pero en una distancia tan corta, que cualquier detalle marca la diferencia, cualquier cosa puede pasar.