Lucas Pérez y Tino Fernández comparecieron juntos esta mañana en la sala de prensa de Riazor para escenificar la despedida del delantero, que se marcha "eternamente agradecido" por las dos temporadas en las que tuvo la oportunidad de "cumplir el sueño de jugar en el Deportivo". Ha firmado un contrato de cuatro años con el Arsenal y espera triunfar en el conjunto inglés, que le ofrece la oportunidad de "competir con los mejores y pelear por los títulos", pero no descarta regresar algún día a Riazor. "Esto es un hasta luego. El Deportivo siempre estará para mí ahí. Siempre habrá un seguidor en Londres", comentó el ariete, que llamó "cínicos" a quienes digan que no decidirían lo mismo en su situación. "No voy a ser ni más ni menos deportivista por marcharme. A día de hoy nadie por la calle me ha dicho nada absolutamente nada que no fueran palabras de agradecimiento. No he vivido que la gente esté molesta. No sé qué me pueden decir, que si me voy por dinero o dejo al Deportivo tirado. No sé. Si alguien pudiera estar molesto, le preguntaría que qué haría si en su trabajo le aparece algo mejor, si cree que no lo tomaría", argumentó el de Monelos.

Tino Fernández, por su parte, expresó su deseo de que el delantero vuelva algún día al Deportivo, "como jugador o en otra función". Lucas deja esa puerta abierta para regresar algún día a su "casa". "No se me pasa por la cabeza decir que no voy a querer volver al Deportivo", señaló el ariete, orgulloso de haberse convertido en el tercer traspaso más caro en la historia del club. Al Arsenal llega con la ilusión de "jugar en Europa, pelear títulos, ir a la selección, crecer como jugador y compartir vestuario con grandes futbolistas".

Sobre el futuro inmediato del equipo coruñés, el ariete recomienda "olvidarse de Lucas en el plano deportivo". "Ahora mismo Lucas es pasado. El Deportivo ha sido grande, es grande y será grande. Hay que olvidarse de Lucas", recalcó el ariete, que no se arrepiente de ningún comportamiento. "No me arrepiento de nada. Soy una persona de emociones, de sentimientos. No creo que haya molestado a nadie. Mi relación con Garitano no es buena, es excelente. Si no me convocó para el Teresa Herrera no creo que fuera por mi comportamiento. Igual notaba que no estaba bien", justificó sobre su ausencia en el torneo veraniego.

Se va con "mucha ilusión y muy feliz" al Arsenal, que le ofrece la oportunidad de "jugar, entrenar y competir con los mejores". "Es la ilusión de todo el mundo en el deporte. Si alguien me dice cuando tenía 10 años y jugaba en las calles de A Coruña que con 28 años iba a cumplir ese sueño, le diría que está loco o lo tiraría por un puente", argumentó el coruñés, emocionado pero sin llegar a derrumbarse en público. "No soy una persona de llorar. Lloro cuando estoy solo. Por mi infancia, o por lo que fuera, me he hecho una persona fuerte que no le debe nada a nadie", recordó el atacante, quien reconoció que con el Arsenal tendrá más oportunidades de ir a la selección. "Es lógico que sea más fácil ir a la selección. Juegas Champions, finales, peleas por títulos... Es triste decirlo, pero es más fácil", añadió Lucas.