La Junta General Extraordinaria de Accionistas en la que se definirán el número de miembros y la composición del nuevo consejo de administración del Deportivo se celebrará en el Auditorio Arao de Palexco el miércoles 11 de julio (19.00 horas), en primera convocatoria, y en el previsible caso de no alcanzar el quorum necesario (al menos, el 25% del capital) se pospondrá para el día siguiente, el jueves 12, en segunda convocatoria, en el mismo lugar y a la misma hora. Poco más de un mes, apenas 35 días, faltan para que los accionistas del Deportivo elijan al equipo directivo que liderará el club los próximos cinco años. Hasta el momento, tres candidatos han anunciado su intención de optar a la presidencia: el actual máximo mandatario blanquiazul, Tino Fernández, más Manuel López Cascallar y Miguel Otero. Una vez anunciada la fecha de la junta, comienza la campaña, en la que los aspirantes podrán detallar sus respectivos proyectos y equipos de trabajo.
Tras el cierre de la última ampliación de capital, el Deportivo cuenta con 25.333 accionistas, quienes se reparten 171.255 acciones que representan un capital social de 10.292.425,50 euros. A la asamblea del mes que viene podrán asistir aquellos accionistas que posean, al menos, dos títulos. Las delegaciones, agrupaciones de acciones y representaciones por medio de otras personas solo se considerarán válidas utilizando el impreso oficial con código de barras y marca de agua que el club enviará a su domicilio a todos los accionistas, o bien realizándolas ante notario, mediante la utilización de las correspondientes escrituras públicas. Debido a las obras en las cubiertas de Riazor, la Oficina de Atención al Deportivista se traslada provisionalmente a la central de Correos, en la calle Alcalde Manuel Casás, donde los accionistas podrán retirar sus acreditaciones para asistir a la asamblea.
UNA SOLA VOTACIÓN
El primer punto establecido en el orden del día comenzará abordando la "fijación del número de miembros del consejo de administración dentro de los límites estatutariamente establecidos", entre tres y ocho componentes, según los Estatutos del club. La intención de Tino Fernández es someter a la aprobación de los accionistas que se aumente el número de integrantes del equipo directivo, actualmente cinco, contando al presidente. También dentro de ese primer punto del orden se procederá al "cese y nombramiento de consejeros de forma individualizada". La idea del club es articular las herramientas informáticas necesarias, probablemente con códigos y pegatinas, para proceder a un único acto de votación en el que los accionistas se pronunciarán simultáneamente sobre ambas cuestiones: la fijación del número de miembros y el nombramiento de los consejeros.
Según el artículo 137 de la Ley de Sociedades Anónimas, existe la posibilidad de que la elección de los miembros del consejo se realice mediante un sistema proporcional, en vez de depositar la confianza en todos los integrantes de la candidatura más votada. En tal caso, el candidato o candidatos que demanden esa fórmula deberán comunicarlo con antelación al club y presentar toda la documentación relativa a los apoyos de los que disponen.
El segundo y último punto del orden del día, "delegación de facultades", no influye en el objeto de la junta, sino que se trata de una disposición legal que tiene que ver con el funcionamiento del consejo y la delegación que en ocasiones realiza de parte de sus facultades administrativas.
Con el anuncio de esta junta extraordinaria para el 12 de julio el Deportivo cumple con lo que había avanzado el pasado 29 de mayo, cuando hizo pública su decisión de "iniciar los trámites para la organización y convocatoria, en fecha a determinar, de una Junta General Extraordinaria de accionistas para el nombramiento de un nuevo órgano de gobierno de la sociedad". La organiza pese al informe negativo del asesor jurídico, Óscar Rama, sobre la solicitud de junta realizada por el candidato OteroOtero, quien aseguró haber entregado al club más de 11.000 acciones delegadas, un respaldo superior al 5% que establecen los Estatutos como mínimo para forzar una asamblea.
