Rayco Rodríguez pasó un verano largo y complicado por la incertidumbre sobre su futuro en el Deportivo, con el que acabó contrato el pasado 30 de junio. Soñaba con renovar, pero finalmente no entró en los planes del club. Ahora brilla en las filas del Unionistas, con el que ya ha firmado tres goles. Si marca el domingo, anuncia que no lo celebrará “por respeto a este grandísimo club”. “Quiero meter siempre. El Dépor lleva una racha de cuatro partidos y cero goles en contra, y no sé si eso es aún más motivación para ir a por ellos e intentar meterles un gol. En el caso de que lo haga, no lo celebraré por el respeto que le tengo a este gran club”, argumenta. Entiende que el final de su etapa en A Coruña era algo que podía pasar y por eso no guarda ningún reproche: “No tengo nada que recriminarle al Dépor. Seguramente pude dar más de mí para que me ofrecieran esa renovación, que no se dio. La situación es la que es y es en la que estamos ahora mismo”, razona el atacante canario.

El futbolista de Unionistas solo tiene palabras de cariño hacia el Deportivo, A Coruña y su afición. “Independientemente de que salieran los resultados o no, la gente conmigo siempre tuvo un trato increíble y me mostró muchísimo apoyo. Me llevo todo lo positivo y con eso me quedo. Defiendo a Unionistas pero en el corazón tengo un poco de deportivismo”, confiesa el joven.

Villares, “cielo ganado”

Rayco tiene “muchas ganas de que llegue el domingo” porque “jugar contra el Dépor siempre es una motivación”. Además, el encuentro le servirá para reencontrarse con su excompañero y amigo Diego Villares, con el que dio el salto al primer equipo blanquiazul el pasado mes de enero. “Mantengo contacto con él cada semana. Todo el rato estoy pendiente de si juega o no. Va a ser protagonista en el Dépor y se lo merece. Me tiene el cielo ganado Villares, con él voy al fin del mundo. Ya le escribí que a ver si juega de lateral derecho esta semana otra vez, y así me enfrento a él”, bromeó Rayco sobre el pivote lucense.