Entrevista | Canterano del Deportivo y jugador del Real Unión, próximo rival blanquiazul

Víctor Eimil: “En mi casa siempre hubo banderas, cuadros y tazas del Deportivo”

“Jugar un año en el Dépor o en el Hércules es como hacerlo dos o tres en otro equipo”

Víctor Eimil, en su presentación con su nuevo club. |  // REAL UNIÓN DE IRÚN

Víctor Eimil, en su presentación con su nuevo club. | // REAL UNIÓN DE IRÚN / Carlos Miranda

Carlos Miranda

Carlos Miranda

Víctor Eimil (Vilalba, 1999) es hoy lateral derecho del Real Unión, próximo rival en liga de los coruñeses, y fue en su día uno de esos canteranos que soñó con llegar a Riazor, pero que debió irse antes de tiempo. El domingo se convertirá en contrincante, pero no ha dejado de ser, en parte, aquel niño deportivista al que su padre le inculcó el sentimiento por unos colores, los blanquiazules.

¿Aún se le remueve algo por dentro cuando juega ante el Deportivo?

Mucho, mucho, por mi padre. Él me inculcó desde pequeñito ser del Dépor y cuando ya tuve la opción de ir a A Coruña a jugar al Dépor era un sueño. No llegué a debutar en Riazor, lo haré en la segunda vuelta, justo en el último partido, pero jugar contra ellos es tremendo.

¿Estaba en la peña de Vilalba?

No, mi padre no era de ir a Riazor, pero sí veíamos todos los partidos. En mi casa siempre hubo banderas, cuadro, tazas del Deportivo, de todo. En Vilalba hay mucho deportivismo.

¿Y cómo se mezcla ese sentimiento con que un día te digan que te tienes que marchar de Abegondo?

Fue un poco duro, también fue el año del COVID. Había gente que venía apretando por atrás como Valín o Isra (ahora en el Bergantiños) y es normal. En la cantera, si no puedes dar el salto al primer equipo, pues tienes que dejar paso a la gente que viene de abajo pisando fuerte. Yo quería llegar, pero a lo mejor no estaba preparado y tenía que dar estos pasos que estoy dando ahora para quién sabe si algún día poder volver (al Dépor). Yo no le cierro la puerta a nada. Ahí está el ejemplo de Hugo Rama. En su momento entendí la decisión del club y busqué otro camino y creo que no ha salido mal.

Ahora está usted en Primera Federación y Jorge Valín sin equipo.

A veces hay pasos intermedios para llegar a los sitios. Son momentos, son rachas. Un día estás en lo alto, otro más abajo, cambia todo de una semana para otra.

¿El Dépor lo fichó del Racing?

Sí, desde pequeñito, llegué con tres años a los biberones. Fui también con la selección gallega y me salió un buen campeonato. Me llamaron del Lugo y no me encontraba a gusto y decidí quedarme en Vilalba. Y cuando era cadete de segundo año me llamó el Dépor y estuve hasta la etapa del Fabril.

Al ser de Vilalba y canterano, ¿pesará el ejemplo de Villares?

Diego es un ejemplo en el deportivismo como persona y dentro del campo. Lo tuvo difícil en un momento en el Fabril, volvió a Vilalba y mira lo que es hoy, una referencia.

¿Se conocen?

Claro, es muy amigo, desde pequeñito. Hablo todas las semanas con él.

¿Ya charlaron del partido?

Aún no. Estos días solo para que me vendiese un jugador de la Liga Fantasy (se ríe). Del partido no creo que hablemos hasta el domingo.

Mella, Martín Ochoa... ¿Cree que de verdad ahora el Dépor se va a convertir en un club de cantera?

Ahora le han dado la oportunidad a Martín Ochoa y a la gente que viene de abajo y creo que la están aprovechando muy bien. Veo los partidos y lo está haciendo muy bien en ataque. De Yeremay no hay nada que decir y David Mella también pienso que viene pisando fuerte. A esa gente se le está dando la ocasión de jugar y la está aprovechando y el Dépor dirá “mira, tenemos a esta gente aquí abajo”.

Y es que Abegondo siempre compitió ante los mejores...

Claro. Además, cuanto más abajo esté el primer equipo, en teoría es más sencillo, pero el club también puede apostar por la experiencia. Hay que demostrar todo en el campo y lo fundamental es que rindan.

¿Ve los partidos del Dépor?

Sí, claro, de todas ligas. Me encanta el fútbol, sobre todo el gallego. Estos días estaré con la Copa del Rey, con el Dépor, con el Lugo...

¿Y qué sensación le ha dejado?

Compitió muy bien ante el Nàstic que venía en buena dinámica. Se llevó el partido y viene ya arrancando. Estaba en una mala racha y ya sumó siete de nueve y no contra equipos cualquiera. Por presupuesto, plantilla y club y afición, tiene que estar lo más arriba posible en Primera Federación. Todos sabíamos que iba a arrancar, pero al final eso hay que demostrarlo en el campo.

Salva Sevilla. ¿Se hace raro escuchar algunos de los nombres que tendrá enfrente?

Y Lucas Pérez, y Hugo Rama, y José Ángel, que a mí me gusta mucho. Son jugadores que vienen de Segunda y son nombres muy importantes en la categoría. También quiere decir que la Primera Federación está a un nivel muy alto.

¿Y por qué le cuesta tanto a un equipo con esos nombres?

Es una pregunta muy difícil de contestar. El fútbol son rachas, momentos y ahora están en buena dinámica y así es más fácil que el talento de esos jugadores, que es grandioso, salga a relucir.

Usted jugó la pasada temporada en el Hércules en Segunda Federación, donde hay una presión enorme como en A Coruña. Esa sensación hasta que no se vive...

Sí, jugar en el Deportivo, jugar en el Hércules es hacerlo dos años o tres en otro equipo. Hay una presión extra. No me arrepiento del paso que di el año pasado (ir al Hércules), porque en el fútbol tienes que vivir esos momentos para aprender y lo soporté muy bien. Estoy contento de haberlo dado, me ha ayudado a mejorar en mi carrera.

¿Cómo arrancaron en la liga?

Estamos muy contentos, el objetivo es salvarse y luego ya mirar lo que se pueda. En casa estamos siendo muy fuertes y muy fiables.

Suscríbete para seguir leyendo