El Bloque remonta, pero no cumple “expectativas”

El Bloque apostó por la calle en vez de por los platós televisivos en lo que definió de campaña “atípica”. Sin embargo, la estrategia concluyó con el BNG quedándose como estaba: con un solo representante en el Congreso, por la provincia de A Coruña, Néstor Rego. No logró el segundo diputado por Pontevedra. Como indicó su portavoz nacional, Ana Pontón, les faltaron 5.500 papeletas.

El resultado obtenido está lejos del “reto” que se había propuesto la formación para estos comicios, incluso se había planteado la posibilidad de conseguir grupo. “No cumplimos las expectativas”, reconoció la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, quien, no obstante, quiso destacar cómo los nacionalistas gallegos recibieron 31.000 apoyos más —un 25 por ciento más— que en los anteriores comicios generales. “Subimos en porcentaje de voto y mantenemos la representación”, resaltó, y además añadió que “vamos hacia un escenario en el que el voto del BNG va a ser decisivo para poder conformar un gobierno”. La “prioridad”, a cambio, es que “la agenda gallega tiene que avanzar”.

Sus primeras palabras fueron para agradecerles a los más de 152.000 gallegos que eligieron la papeleta nacionalista el apoyo y garantizarles que servirá para “impulsar la agenda gallega” y “derechos y libertades” y a negociar esos objetivos condicionó el posible apoyo de su formación a un futuro gobierno. En esa línea, avanzó que el BNG quiere ser “muy claro” y que “desde ya tiende la mano para poder negociar un gobierno alternativo” a lo que definió como “derecha y extrema derecha antigallega” y “evitar el riesgo” de que se pueda producir una repetición electoral. “En lo que dependa del BNG no va a producirse”, proclamó, para añadir su voluntad de que la “negociación llegue a buen puerto”.

Pontón indicó que fuera del contexto estatal solo hay dos fuerzas que suben y una de ellas es el BNG, pero no se dan por “satisfechos”. Con todo, buscó una explicación a los resultados en que se ha producido “una polarización importante de las fuerzas estatales”, “con un falso enfoque presidencialista”. “Hubo intento de que no se hablase de nuestro país” y “costó”, argumenta, que el mensaje que defiende el Bloque “se hiciera hueco”. En todo caso, a preguntas de los periodistas, afirmó que es “optimista” sobre la perspectiva de “evitar un gobierno de la derecha y extrema derecha machista, racista y xenófoba”.

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El Bloque alcanzó su techo electoral en el Congreso en 2000, cuando superó los 306.000 sufragios y un récord de diputados: tres. En 2019, casi dos décadas después, en los penúltimos comicios, los apoyos se habían rebajado a unas 120.000, cifras que remontaban las de las elecciones previas y que se tradujeron en un único diputado, el mismo que representará a la formación nacionalista de nuevo en el Congreso. Con todo, su elección supuso el regreso de los nacionalistas gallegos a las Cortes después de ocho años de ausencia, una posición que aguantan y que volverá a darle a Galicia una voz “libre” en Madrid, alega Pontón.

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Sin embargo, esta vez el Bloque partía con expectativas de elevar esa cifra y en los últimos días su portavoz nacional, Ana Pontón, animó a los gallegos a poder llegar a conseguir que la formación dispusiese de grupo en el Congreso tras sumar casi un 30% más de ediles en los comicios municipales. Precisamente Pontón instó a votar al BNG previendo un escenario en mayorías absolutas en el que la formación aspiraba a ser “decisiva” en la conformación del próximo gobierno. Durante la campaña, Ana Pontón incidió en que los nacionalistas vivían su mejor momento y las encuestas apuntaban la posibilidad de que ganase diputados en Pontevedra.

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La cifra con la que los nacionalistas acabaron el día de ayer no les ayudó a sumar más escaños nacionalistas en Madrid, aunque la formación sobrepasó el listón que había logrado en 2019, cuando obtuvo 120.456 sufragios. Pontón agradeció el apoyo de la militancia para conseguirlo. Con todo, en el escenario configurado ayer tras las urnas, el BNG se ve ubicado en la cuarta posición en número de votos, tras PP, PSdeG y Sumar.